
El Milan no solo sigue sin ganar un derby, sino que además le meten cuatro goles en la segunda parte, anulando por completo un 0-2 de la primera parte, quedando en el mayor de los ridículos y que muchos desearán que la temporada acabara aquí, porque este equipo ha tocado ya techo hace mucho y ahora queda estrellarse una y otra vez, especialmente contra los grandes…
PRIMERA PARTE
Una intensa primera parte y debo decir que de las mejores que he podido ver del Milan, pero también un Inter ciertamente irreconocible que solo generó peligro en los saques de esquina, pero no creando jugadas.
La primera ocasión del partido es para el Milan en el 8′, con Calhanoglu que llega al borde del área, supera a un rival y saca un derechazo que impacta en el poste derecho de Padelli. Respondió Godin en el 19′ rematando de cabeza tras un córner que se fue fuera por muy poco.
Hoy Ibra como único delantero centro si bien apoyado por Rebic, su tarea se basó principalmente en bajar los balones por alto, controlarlos y buscar al compañero mejor situado, lo que generó espacios para Calhanoglu, Theo y Castillejo, aunque les faltó precisión en los metros finales.
El Milan buscó la velocidad y quiso aprovecharse de la gran cantidad de errores que cometieron los jugadores de Conte, que a decir verdad, no le dieron excesivo trabajo a Donnarumma, donde es curioso ver como Kjaer estuvo algo más seguro que Romagnoli, lo que si predominó es la gran concentración del equipo, con Calhanoglu haciendo marcaje casi al hombre sobre Brozovic, algo que resultó bastante efectivo.
En el 40′, llega por fin el primer tanto rossonero: centro al área donde Zlatan gana en el salto a Godin, tocando hacia donde estaba Rebic, con Padelli que hace una terrible salida y deja la portería totalmente vacía para que el croata solo tenga que empujarla: 0-1, merecido por otra parte.
Cuando se llegaba ya al minuto de descuento, llega el 0-2: saque de esquina del Milan donde se toca en el área pequeña, con la suerte que le llega al rechace a Zlatan que estaba totalmente solo en el primer palo y sin oposición alguna, marca de cabeza a placer.
Con un sorprendente 0-2 todos se fueron a vestuarios, que duda cabe que la baja de Handanovic y ciertas decisiones de Conte, junto a la estrategia de Pioli y la determinación de los jugadores rossoneros, esa mezcla hizo que se consiguiera ese resultado parcial, pero quedaba toda la segunda parte por disputarse.

SEGUNDA PARTE
Una terrible entrada de Vecino sobre Theo marcó el inicio de la segunda parte, con el uruguayo que vio la tarjeta amarilla. El Inter en el 51′ redujo distancias con Brozovic que le favorece un rechace y sin dejarla caer remata de manera perfecta, con Gigio que estaba tapado por varios jugadores para hacer el 1-2.
Y en el 52′ llega el 2-2: obra de Vecino donde la defensa rossonera no está a la altura de la situación, con Godin que cede a Alexis Sanchez con Conti que rompe el fuera de juego, Donnarumma tiene que salir para tapar pero el rechace le llega al uruguayo que tiene la gran suerte de que el balón se cuela por debajo de las piernas de Kjaer y hacer así el 2-2, en dos minutos a la basura el resultado inicial…
La guerra psicológica del Inter con el árbitro empezó a hacer de las suyas, protestando todas y cada una de las decisiones en su contra, donde uno de los entrenadores asistentes fue expulsado por roja directa, se respiraba nerviosismo y además el Milan dejó de tener el control, en cuanto el Inter presionó un poco, los de Pioli se cayeron como un castillo de naipes.
Zlatan lo intentó a balón parado en el 67′ pero se marchó fuera, el equipo intentó volver a jugar como en la primera parte pero se vieron superados por el empuje del Inter, que además dominó la posesión.
Y en el 70′ se completó la remontada del Inter, con De Vrij que muy mal sujetado por Romagnoli remata de cabeza y hace el 3-2, donde Conte aprovechó para dar entrada a Eriksen, en el mejor momento del Inter seguramente de toda la temporada y ahora mismo empatados a puntos con la Juventus para luchar por el título.
Se marchó Castillejo en el 79′ para dar entrada a Leao como primer cambio del Milan, en la cara de Samu se pudo ver la tremenda frustración de ver como había cambiado por completo la cara del partido y un Milan imposible de responder a las acometidas del Inter, donde además Eriksen remató de falta directa a la esquina de la escuadra.
Kessié se marchó en el 80′ para que entrara Paquetá en lo poco factible que le quedaba el banquillo, porque ese podría ser el resumen del mercado de enero, muchas salidas pero una temporada más, el banquillo queda desierto de opciones, con Conti además que vio amarilla y era uno de los apercibidos, por lo que será uno de los ausentes en el próximo encuentro.
Rebic se marchó en el 83′ y fue sustituido por Jack Bonaventura, cambios a mi gusto bastante tardíos, con Bennacer y el propio Jack queriendo arreglar el mundo ellos solos, con Paquetá que con pocos minutos a disposición, no se le puede pedir el mundo, ya de por sí en una situación bastante irregular la suya, donde no apostaría por su continuidad en cuanto llegue el verano.
Ibra remató al palo en el 89′ si bien podría existir falta en el salto ante Skriniar donde no remató con la cabeza de manera perfecta, pero si llegó el cuarto tanto del Inter en el 93′, obra de Lukaku donde la defensa rossonera se olvidó por completo de él, especialmente Kjaer que no quiso saber nada del belga que tenía justo detrás y que remató de cabeza en el segundo palo para hacer el 4-2 que sería definitivo.
MI OPINIÓN
En España se dice que de ilusiones también se vive, pero desde luego lo que vivimos con este Milan es un fracaso tras otro a lo largo de todas las temporadas, ningún equipo que quiera optar a ser grande, se puede dejar remontar un 0-2 y acabar siendo goleados por un Inter que ahí si que nota la diferencia de inversión y de puntos en la tabla, si ahora son líderes no es desde luego por casualidad.
La diferencia de entrenadores pero sobre todo de plantilla, la diferencia de calidad, experiencia y precio ha pasado factura, el Milan nunca volverá a ser un grande teniendo a estos jugadores, donde hoy por ejemplo la valoración de Romagnoli ha bajado un 40% de su valor, cuando hasta Theo te hace un partido bastante ramplón es síntoma inequívoco que las cosas no pueden salir bien.
Seguir contando con gente como Kessié o Calhanoglu para todos y cada uno de los partidos, dejar marchar a Piatek sin contar con un sustituto a la altura, esperando que sea Ibrahimovic quien resuelva todos los atolladeros, dejar marchar a Suso dejando a Castillejo y sin otro reserva de nivel, seguir contando con gente joven con cero experiencia y dudosa calidad, es ahí donde ves quien está haciendo un gran proyecto y quien está destinado al fracaso, comparando sobre todo cada una de las directivas.
Viendo lo que está haciendo Gazidis cobrando auténticas millonadas por no conseguir absolutamente nada, se quiere entrar dentro de los parámetros del FPF y lo que ocurrirá es que la mitad de los jugadores dejarán este equipo en verano sobre todo si al final no se juega ni siquiera la Europa League, ahí no tendrán problema con los salarios, pero desde luego nadie querrá seguir vestiendo esta camiseta viendo estos resultados.
Porque lo que queda es el presente y una segunda parte tan horrible como esta o el tremendo sufrimiento ante equipos de un nivel inferior como es el Verona o el Brescia (en cuanto a plantillas), me reafirmo en mi opinión de que somos el nuevo Udinese, deseando que explote algún jugador barato para luego venderlo al mejor postor, porque no hay mucho más que aspirar actualmente.
Ni que decir tiene que Pioli no seguirá en cuanto llegue el verano, siendo otro entrenador quemado por la directiva dándole migajas con estos jugadores, donde no estamos tan lejos del desaparecido Palermo que cambiaba de entrenador casi cada semana, donde aquí lo raro es que quien empiece acabe la temporada… la lista se va alargando cada vez más, pero el problema resta y nadie lo consigue solucionar…