Ibra piensa en retirarse

El gran frío y sigue sin bastar. Zlatan Ibrahimovic se marchó a Suecia tras estar seguro de no tener el coronavirus. Vive en un país no cerrado, pero ese no es el problema: cerca de Estocolmo, Zlatan tiene espacio para entrenarse, correr y vivir casi de manera normal, aunque sigue habiendo bastante miedo.

Como todos los atletas que tratan su físico como una máquina perfecta, la estrella del Milan tiene preocupación y mucha perplejidad. Se entrena sin problemas, quizás le cuesta volver al ritmo no por edad, sino por su físico duro y pesado. La preocupación es seguir sano tanto él como su mujer y sus hijos.

La preocupación es seguir viviendo en un mundo unido y libre, pero el resto del mundo se cae. Zlatan, el jugador con maletas por definición, se da cuenta y se sigue haciendo preguntas. El Milan decidió cerrar Milanello mucho antes del gran caos, por tanto Ibra tomó el primer vuelo antes de que todo cerrase.

Su primera exigencia era volver y quedarse con la familia. Pero el segundo problema del sueco es saber qué hacer con su carrera. Él que llegó tras el eterno cortejo de Zvone Boban y Paolo Maldini, quedó sorprendido por el despido del croata. Cada uno piensa en sí mismo en tiempos de crisis, pero Zlatan no es precisamente así.

No quiere dinero, ni fama, solo un proyecto que ahora parece congelado. Debido al coronavirus, ni siquiera hubo una reunión con Gazidis. El virus que ha paralizado al mundo de manera paradójica puede resultar útil para arreglar o retrasar muchas situaciones en el mundo del fútbol, pero Ibra y su futuro, su final de carrera se cuelan entre la ordinaria administración de un club que navega entre clasificarse a Europa o la nada.

Zlatan se hace preguntas: ¿qué jugadores, qué planes, qué objetivos? Quedarse y hacer de tutor del equipo de mañana en un incierto futuro. ¿Cuales son los reales planes de Elliott? Y es aquí donde aparecen conclusiones de pasos ciertos y perplejidades.

Se discutía de un futuro como embajador del Milan en el mundo. Ahora ya no se sabe nada y no es solo culpa del virus que está sacudiendo al mundo. Quizás en este punto estar cerca de Estocolmo y un futuro de mánager con Mino Raiola podría tener más sentido.