Entrevista a Filippo Inzaghi

La noche del partido perfecto parece no acabar nunca. Sobre las 14:00 Inzaghi estaba sentado con Silvio Berlusconi, Ricardo Kakà y Clarence Seedorf, en el restaurante del 10 rossonero. Tras el 3-0 en Manchester United (2 de mayo de 2007), Berlusconi eligió ese sitio para premiar a Seedorf, pero que estuviera consigo Inzaghi.

Por un simple motivo: empezar a animarlo en vista de la final ante el Liverpool. Realmente no es que hiciera falta, viendo como acabó la cosa el 23 de mayo de 2007: doblete de Pippo y nueva Champions conseguida.

Pippo, ¿cual es el primer recuerdo de Milan-Manchester?

“Me vienen en mente tres cosas. Las miradas en el autocar: todos estábamos muy concentrados. La lluvia: durante el primer tiempo vino un temporal increíble. La gente: San Siro es siempre especial, pero esa noche lo fue mucho más”.

Old Trafford hoy y San Siro dentro de una semana estarán desiertos. ¿Quién pierde más?: ¿el hincha que no puede disfrutar un partido en vivo o el jugador al que le falta un fundamental componente de su trabajo?

“Gran pregunta y difícil respuesta. Creo que al final le afecta más al jugador, porque el hincha puede ver el partido en TV mientras que quien juega no puede tener el apoyo de la gente ni tampoco imaginárselo de manera significativa”.

Ese Milan y ese Manchester eran claramente mejores que los de ahora, pero hoy serán igual de competitivos en esta ocasión. Y esa fue una semifinal de Champions. Pero la fascinación sigue siendo grande

“Totalmente. Es la fascinación de las camisetas. En todo el mundo conocen el Milan y el Manchester United. Quien vista esos colores sabe que le espera un reto especial y gratificante, pero también de una notable responsabilidad. Cuando juegas un partido como este en un imponente estadio, aunque sea vacío, sabe que puedes ganar o perder, pero seguro que crecerás”.

Milan segundo en Italia, United segundo en Inglaterra. Pero todos dan favorito al Manchester: ¿Justo?

“En este tipo de encuentros no hay favoritos. Y si existen, el pronóstico cuenta hasta cierto punto. Solo hay que luchar y correr por 180 minutos, luego echar cuentas”.

¿Es una final anticipada de la Europa League?

“Llega demasiado pronto y es una lástima. Pasará el turno quien le de un empujón más. A los chicos del Milan espero sobre todo que lo disfruten: estas emociones se quedan dentro y te enriquecen. Yo les animo”.

¿Le gusta este Milan?

“Mucho. Está haciendo un gran campeonato y estoy golpeado del entusiasmo que transmite cuando juega. Se ve que los chicos tienen ganas de correr, de atacar, de llevar a lo más alto el club. Estoy seguro que el próximo año el Milan volverá a descubrir el escenario de Champions”.

¿Qué jugadores de este Manchester United jugaría en 2007?

“Difícil hacer confrontaciones, han pasado 14 años que en este deporte son muchísimos. Pero seguramente Rashford es un delantero de gran nivel y Pogba, a pesar de muchas dificultades, tiene la calidad del campeón”.

Volvamos a 2007. En la ida perdimos 3-2 pero el resultado justo era el empate. ¿La derrota fue un empujón más para hacer el ‘partido perfecto’?

“Seguramente nos dio una carga particular, porque en Old Trafford demostró que no éramos inferiores y quisimos confirmarlo en San Siro jugando un partido excepcional. Algo que por fortuna conseguimos”.

Y luego, la noche antes, llegó otra gran motivación…

“Ah sí, nos clasificamos para la final 24 horas antes que nosotros fue el Liverpool, es decir, el equipo que nos infligió una tremenda desilusión en 2005 en Estambul. Esperábamos esa revancha, la deseábamos fuertemente. Y el Manchester United pagó también nuestro deseo de esa revancha”.

A propósito de final: en Atenas conseguiste un doblete en la final

“Esa noche contaba solo ganar y no es por decirlo sin más. Pero está claro que el doblete de Liverpool resta en mi corazón por muchos motivos. Recuerdo bien que, nada más ganar al United, Berlusconi y Galliani me dijeron que empezara a pensar solo en la final de Atenas porque marcaría diferencias. Hacerles felices a ellos y a los hinchas del Milan me sigue llenando de orgullo”.