Más rojo que negro. Rojos de rabia por la caída al vacío, pero negros pensando en futuro no. El Milan jugó en San Siro bajo la interesante mirada de Gordon Singer, el hijo del administrador del fondo Elliott propietario del club. Gordon se quedó en Milán durante unas cuantas horas ayer.
Difícil conocer sus itinerarios, siendo una persona realmente reservada. Lo que parece claro es que el fondo Elliott no dejará al Milan de lado aunque no se consiga la clasificación en Champions. El entrenador Stefano Pioli es estimado y totalmente confirmado, lógicamente la campaña de fichajes sin Champions deberá tomar otro camino.
Pero hay puntos clave, empezando por el acercamiento de la propiedad del club. El fondo Elliott y los Singer se vieron en Milan por una serie de eventos impredecibles, pero hay apasionados sobre el argumento. El Milan no caminará solo a menos que lo haga con piernas de hierro. Sobre esto no existen dudas.
Gordon Singer estuvo en San Siro viendo el partido ante el Cagliari. Una señal de atención no banal en un momento como este. En el vestuario tras el partido había mucha desilusión, ninguna proclama, nada de nervios. El Milan considera posible el acceso a Champions que cambiará rápidamente toda la historia: el fondo Elliott programó un ascenso más lento, pero la estrepitosa temporada del equipo autorizó pensamientos positivos. Luego la caída y el ascenso. Ante el Atalanta se fuera fuera de casa y eso, viendo la racha del equipo fuera de San Siro, genera ciertas esperanzas.
Lógicamente sin Champions los planes cambiarán. Es posible todavía el rescate de Tomori al Chelsea, siempre que el jugador acepte quedarse en un equipo que no juega la competición europea más importante. Pero en el Milan lo trataron muy bien, como un titular, como para hacer secundario el resto de consideraciones.
Luego está Brahim Díaz. Está claro, jugar en el Real Madrid es un sueño para todos, pero ¿seguir siendo suplente? El joven español-marroquí debe meditar sobre esto, pero más que nada deberá meditar el club blanco: con todos los problemas que tienen, ¿tendrán tiempo para ocuparse de uno de muchos centrocampistas de calidad que puede meter en la lista de componentes y excluidos por fuerza? Otro año de cesión podría ser funcional para todos, pero pasa lógicamente por clasificarse a Champions.
Y luego está Gigio Donnarumma, el tema candente. La Juve debe hacer su oferta, pero está claro que la clasificación a Europa cambia todos los equilibrios. Ha respondido a las críticas por su silencio con tremendas paradas, que no faltaron tampoco ante el Cagliari. Donnarumma ama al Milan y quiere seguir, pero hay situaciones económicas a solucionar.
El duelo entre Juve y Milan por la Champions complicó todo, pero Gigio parece tener las ideas claras. Sin esos 50 millones de la Champions que se quede parece complicado, pero en este caso no se trata solo de dinero. Sobre todo en ambiciones. Y son ambiciones las que impiden al Milan renovar al contrato con Hakan Calhanoglu.
El centrocampista turco quiere un salario de jugador top, algo que el Milan no quiere asegurarle y sin la seguridad de disputar Champions. El Milan necesita hacer un partido perfecto en Bérgamo. Ante el equipo que lo humilló y permitió la construcción de un nuevo ciclo. Sin la goleada de diciembre 2019 en Bérgamo no habría llegado Ibrahimovic ni todo lo demás.
El Milan de Pioli ha pasado mucho, perdieron y levantaron. En duda están el dinero existente y fichajes, como el de Vlahovic, pero el primer pensamiento es el partido del domingo, como ganarlo y salir del pase. Para el mercado ya habrá tiempo.