Preparando el Bolonia-Milan

El jefe dijo: “No debemos rendirnos, el mundo no se acaba, mientras haya esperanza yo sigo creyendo”. Palabras del líder del grupo, las de Zlatan Ibrahimovic, como motivador, mientras el técnico del Milan Stefano Pioli fue a por el lado práctico, reconociendo que desde un punto de vista aritmético en Europa no todo está perdido y el Atalanta de hace dos temporadas así lo enseña, pero ahora se hace realmente duro.

Mucho está perdido, pero el Milan no puede ni debe darse por vencido por varios motivos: el orgullo de los jugadores, el prestigio del club, las posibilidades, aunque la situación sea muy complicada, de conquistar quizás la clasificación en Europa League, lo que crearía algún problema organizativo, pero permitiría realizar otras experiencias intentando mejorar algo el ranking, que estará penalizado de todas formas para el futuro próximo.

Y hay una cuestión económica que no se puede excluir: llegar al final de una competición menor el Milan podría conseguir unos 30 millones. Pero lo importante ahora es continuar, con tres partidos en liga que son diferentes en calidad y clasificación de los rivales, pero tienen un denominador común: en diez días el Milan puede estar realmente al completo.

Ibrahimovic, Rebic y Kessié ayer se entrenaron, donde Pioli ante el Bolonia se podrá ver un equipo diferente del visto ante el Oporto. Ibra está creciendo y es difícil imaginarlo en el banquillo, donde vuelve Ante Rebic. Hoy hace el décimo día desde que Theo Hernandez resultó positivo al Covid: si la prueba de hoy confirma que el virus ha pasado, Theo podría volver a entrenarse.

Podría ser convocado como suplente, aunque solo tendría un entrenamiento en las piernas, pero la posibilidad existe. Y sobre todo es probable que pudiera jugar de titular el martes ante el Torino. En el caso de Brahim, hasta el lunes no llega el décimo día, si ese día resulta negativo, podría estar el siguiente sábado ante la Roma.

ALVAREZ, LUCCA Y HANDEL

Ayer hablamos de Julian Alvarez, delantero de River Plate, pero hay más. El activo Geoffrey Moncada, el jefe de los ojeadores, estuvo en Monza hace dos semanas para seguir el Italia-Suecia de Sub-21: vio a Tonali, pero sobre todo a Lorenzo Lucca, el delantero del Pisa.

Y ahora se busca al sucesor de Franck Kessié, destinado a irse del equipo al acabar contrato. Uno de los emisarios rossoneros puso el nombre de Ioao Palhinha (25) del Sporting de Lisboa, pero su precio es de 50 millones. Ahora suena más el nombre de Tomas Handel (20), fichado por el Vitoria Guimaraes y protagonista con la Sub-21 portuguesa, donde tiene también el pasaporte austriaco.

También se siguen a los centrales Vitinha del Oporto y Paulo Bernardo del Benfica, donde se piensa que en enero venga Adli del Burdeos, donde en días anteriores habló de su nueva experiencia en la Serie A. La caza de protagonistas del mañana prosigue con las mismas modalidades. Y con altos porcentajes de éxito.