¿La primera piedra del nuevo Milan? La confirmación de Rafael Leao, en el centro de las atenciones del PSG. Jorge Mendes tiene una oferta de 70 millones de euros para el club rossonero y un salario de 6 millones netos para su asistido.
Un tesoro, una tentación para todos. Pero la reacción es clara y compartida: la directiva de Vía Aldo Rossi no parecen interesados, al igual que el jugador. Pero son días claves para la decisión definitiva. El delantero portugués, por otra parte, tiene en mente una prioridad: dejar atrás la pesadilla del Sporting de Lisboa.
En enero su viejo club ha pedido que le bloqueen un quinto de su salario actual, fuerte de la sentencia portuguesa que cuantificaron un daño de 16,5 millones por esa fuga en 2018. Los abogados italianos de Rafael han congelado ese dinero, pero el 7 de abril el Tribunal de Milán volverá a comentar al respecto: un delicado trabajo diplomático para llegar a una transacción extrajudicial con el Sporting, donde el Lille está dispuesto a poner su parte.
Y el Milan espera cerrar esta lucha contra el tiempo con un acuerdo que sea luego, el preludio de renovación del jugador. Leao tiene contrato hasta 2024, mientras que Maldini y Massara quieren que esa fecha se extienda hasta 2026.
Por tanto, hay buenas intenciones, aunque solo los próximos días se podrá tener un cuadro más claro del asunto, un auténtico nudo para el mercado rossonero. En París aparte son días tormentosos tras quedar eliminado por el Real Madrid en Champions.
Mbappé va directo al Real Madrid y para su sustituto se piensa en el noruego Erling Haaland, mientras que toda Francia invoca el regreso de Paul Pogba. Pero hace falta más y la candidatura de Leao entra dentro de esta lógica.
Obviamente la estrategia rossonera depende del éxito de este caso. El eventual sacrificio del portugués fatalmente llevaría a tener que reinvertir ese dinero. Pero atención: al Lille le corresponde el 15% del tránsfer: por tanto para las arcas rossoneras le quedarían menos de 60 millones, un motivo para no aceptar esa oferta…
Siguen los contactos para subir el nivel técnico de la plantilla. Siempre con el Lille esperan el momento adecuado para negociar el traspaso de Botman, pero el Newcastle no se rinde y el partido no está cerrado. Manero, el agente del holandés, sigue también al compatriota Bergwijn, actual jugador del Tottenham.
La llegada de Kulusevski le ha quitado espacio y el ex-PSV está atraído de la idea del Milan. Aparte que le quedan dos años de contrato y su fichaje tendría un relativo coste. Aparte que a Pioli necesita un extremo alto de calidad sobre esa banda. La directiva se ha empezado a mover, sabiendo que Fabio Paratici deberá cambiar de caras para la próxima temporada.
Si os gusta Rafael Leao y su manera de jugar, imaginen el tener dos. Si bien Steven Bergwijn (24) tiene otro físico con respecto al portugués: le saca quince centímetros y usa el baricentro bajo para accionar ese motor que tiene por piernas. Pero al igual que Rafa, es un jugador rompe defensas, una aceleración siempre lista para romper cualquier esquema defensivo.
Si bien este holandés le gusta jugar por la parte izquierda (precisamente el mismo lado que Leao), pero puede moverse por el lado derecho, ya que juega mucho por esa parte. No podría usar mucho el pie derecho para rematar o dar asistencias, pero le quedaría el regate y la carrera a campo abierto.
Pioli tendría que cambiar el balance del 4-2-3-1, que ahora ve el lado derecho más conservador, con Saelemaekers o Messias para hacer de contrapeso a Leao. No marca mucho, tiene calidad en el último pase pero no siempre ha convencido en la Premier primero con Mourinho, Espirito Santo y Antonio Conte.
El objetivo más importante sigue el obtener un delantero de futuro: el que luche por un puesto con Giroud, viendo que Ibra cada vez está más cerca de retirarse. Y el nombre de Gianluca Scamacca sigue estando de moda, jugador que gusta mucho al Inter, pero les cuesta cerrar la operación, donde Marotta punta a obtener una cesión con obligación de compra, frente a un precio de compra de más de 40 millones de euros.