Milan y Puma renuevan su acuerdo

Todo está parado, la afición mueve la cabeza desconsolada desde hace días, aferrada a la esperanza de ver por fin materializadas las firmas del “mercado de fichajes” en los contratos de Maldini y Massara. ¿Todo parado entonces? Realmente no.

Porque un club de primer nivel como el Milan no vive solo del mercado, al contrario: la sostenibilidad económica imprescindible para batir los números rojos, hacer las paces con el fair play financiero de la Uefa y finalmente ser libre de operar sin préstamos, sobre todo pasa por otros caminos.

El estadio, es evidente. Pero eso todavía no llega. Es cuando aparece en escena la parte comercial de Vía Aldo Rossi. Con una renovación muy importante y decididamente “pesada” desde el punto de vista económico.

El club rossonero y Puma, patrocinador técnico desde 2018, continuarán su relación moviendo el calendario mucho más allá. Desde enero de 2023, o la expiración del antiguo contrato, hasta 2028. Un quinquenio como se hace para los jugadores más prometedores, los considerados pilares del proyecto deportivo.

Aquí, en cambio, hay un proyecto comercial global que empezó a despegar hace ya un par de años y que ahora han puesto definitivamente el turbo. Efecto Scudetto, sin duda, porque los resultados en el campo crean un círculo virtuoso a los ojos de los posibles inversores (véase la venta del club).

Pero también “efecto proyecto”, en el sentido de que el Milan y sus socios comerciales en los últimos años, es decir, desde la llegada de Elliott, han previsto un camino de crecimiento en todas las áreas que ha tomado forma y se ha hecho realidad.

Promesas cumplidas. En definitiva, una cuestión de credibilidad, uno de los principales ingredientes a la hora de atraer dinero del exterior. En cuanto al aspecto económico, obviamente no se filtran cifras, pero el aumento será sustancial.

En términos generales, el acuerdo pasará de 14 millones al año a alrededor de 30-35 millones por lo que se convierte en el acuerdo de patrocinio más rico en la historia del club. Un nuevo posicionamiento del Milan en un tramo más alto que en el pasado. Millones que evidentemente serán reinvertidos en el crecimiento de la empresa, en todos los sentidos.

Por lo tanto, es un error pensar que la cantidad se usará íntegramente en manos de la gerencia exclusivamente para operar en el mercado. Además, el acuerdo con Puma no se limita al concepto clásico de patrocinador, sino que es una asociación más amplia que también concierne al sector juvenil y la actividad básica: de hecho, la empresa alemana también se convierte en “Official Naming Partner” de Vismara, la formación. centro ubicado en Milan donde trabajan selecciones juveniles masculinas y femeninas.

Se llamará Centro Vismara – Puma House of Football, prevé inversiones dirigidas a las próximas generaciones de jóvenes rossoneri y también albergará eventos e iniciativas. Con este acuerdo, desde agosto de 2020 se han producido 2 alianzas -entre nuevas empresas y renovaciones de contratos existentes- puestas en blanco y negro, con un crecimiento ligado a acuerdos comerciales de más de 17 millones en el último balance respecto al año anterior. El año en curso termina pasado mañana: en términos comerciales, se esperan nuevas mejoras.