El andamiaje no solo aguanta, sino que reluce porque cada uno sabe lo que tiene que hacer y muchos encuentran en el banquillo a alguien que les pisa la nuca. Conciencia y estímulos: la combinación tiene su porqué. Desde hace algún tiempo, el Milan es como un avión que vuela sobre el océano: todo lo que necesitas es un piloto automático para cruzarlo. La primera salida del campeonato, sin embargo, también destacó algunas imperfecciones.
Y si algunos son de naturaleza táctica y están relacionados con la esfera de atención, solo trabaje en ellos, otros son estructurales. Y aquí tenemos que involucrarnos de otra manera. Milan-Udinese ha demostrado, objetivamente, que el departamento que necesita ayuda es la mediana. Una necesidad que la fluidez y el conocimiento colectivo tienden a minimizar, a ocultar.
Pero el calendario está apretado, las necesidades de un equipo que lucha por el Scudetto y por superar los grupos de Champions son muchas, y por ello hay que intentar protegerse todo el tiempo que sea posible. Quedan dos semanas disponibles, es decir, hasta el 1 de septiembre. El centro del campo necesita otro potencial cuarto titular, porque por esos lados la situación ahora mismo es solucionable, pero en el futuro podría volverse delicada.
Los profesores titulares son dos, no hay escapatoria: Tonali y Bennacer tienen las llaves del equipo y eso no se pone en duda. El resto, sin embargo, se puede discutir. Porque no se puede esperar que Krunic trabaje como becario a tiempo completo, él que sería ante todo un mezzala (la buena voluntad y la abnegación, cuando el listón sube, ya no son suficientes).
Porque Pobega es un perfil válido pero el pasado sábado jugó sus primeros minutos con los rossoneri y hay que darle su tiempo. Porque Bakayoko es considerado por Pioli fuera del proyecto táctico. Porque es cierto que Adli también puede actuar de centrocampista, pero no está preparado para jugar de interior.
Entre los dos, sin embargo, Onyedika gana por puntos. Joven con amplio margen de mejora, físico imponente, destaca sobre todo en la fase de no posesión. En la recuperación de balones y en la cobertura de espacios. El costo sería de menos de diez millones, por lo tanto permitido por el presupuesto restante. También en lo que respecta a Onana, el coste de la tarjeta estaría bien: según ha informado la prensa francesa, el Burdeos ya ha rechazado una oferta del Verona por cinco millones, pero no pide la luna.
En cuanto a Onyedika, hablamos de un jugador bastante físico, hábil en las coberturas pero al que no le importan las inserciones. Pioli nos decía hace unos días: “Buscamos dos prerrogativas en un centrocampista. Explosividad e inteligencia, jugadores con buen motor y que saben estar en el campo. El resto no importa. No queremos sustituir a Kessie por una doble, no existe otro Franck”. Pero puedes intentar darle forma en Milanello.
En resumen, muchos buenos porqués. Todas las cosas que la gerencia obviamente conoce bien. Por eso, si hay que elegir en qué área del campo invertir el puñado de millones adelantados -una decena, más o menos-, la mediana será el primer punto de la agenda. Y sólo después pensaremos, eventualmente, en la defensa.
Básicamente, el Diablo solo tiene dinero para un movimiento. Entonces, ¿qué está hirviendo en la olla? Después de haberse despedido en unas horas de Sanches -que emigró a París- y de Chukwuemeka -que recaló en el Chelsea-, de haber constatado que Santamaría (Rennes) es demasiado cara, y la pista que conduce a Sarr (Tottenham) se ha enfriado un poco.
Mucho, el radar rossonero se movió a otros dos perfiles. Son los nombres que encabezan la lista, a saber, Onyedika y Onana. El primero es un nigeriano de 21 años que juega en Midtjylland, el segundo un camerunés de 22 años con tarjeta del Burdeos. En este último caso, los clubes han conocido recientemente la operación Adli.
Entre los dos, sin embargo, Onyedika gana por puntos. Joven con amplio margen de mejora, físico imponente, destaca sobre todo en la fase de no posesión. En la recuperación de balones y en la cobertura de espacios. El costo sería de menos de diez millones, por lo tanto permitido por el presupuesto restante. También en lo que respecta a Onana, el coste de la tarjeta estaría bien: según ha informado la prensa francesa, el Burdeos ya ha rechazado una oferta del Verona por cinco millones, pero no pide la luna.
En cuanto a Onyedika, hablamos de un jugador bastante físico, hábil en las coberturas pero al que no le importan las inserciones. Pioli nos decía hace unos días: “Buscamos dos prerrogativas en un centrocampista. Explosividad e inteligencia, jugadores con buen motor y que saben estar en el campo. El resto no importa. No queremos sustituir a Kessie por una doble, no existe otro Franck”. Pero puedes intentar darle forma en Milanello.