El tiro de la Champions pasa por Roma. Antes de mirar al Euroderby con el Inter, el Milan está llamado al choque directo por la cuarta plaza con los Giallorossi de Mourinho. “Un partido que vale doble”, como subrayó Stefano Pioli, y en el que el Diavolo deberá dar respuestas para recuperarse del mal trago a domicilio.
La temporada pasada, los rossoneri habían construido gran parte del Scudetto lejos de San Siro, con una racha imparable. Este año, los números muestran un panorama diferente, y el factor tricolor se ha convertido en un punto débil. En los últimos 10 partidos a domicilio de la Liga A, sólo tres victorias han sido para los rossoneri: el póker en el Maradona contra el Nápoles, la derrota por 1-0 en Monza firmada por el Messias y el 2-1 en el Arechi contra el Salernitana, en el primer partido del nuevo año.
Fotografía a la clasificación: de momento, el rendimiento a domicilio no es de Champions. En liga, el Milan ha sumado 23 puntos fuera de casa en 16 partidos (media de 1,44) y es quinto, por detrás del Nápoles (43), el Lazio (31), el Atalanta (28) y el Roma (25).
La Juve y el Inter, sexto (23) y octavo (21) con un partido menos a domicilio, podrían adelantar al equipo de Pioli en la próxima jornada. Lejos de San Siro, los rossoneri han sumado seis victorias, cinco empates y cinco derrotas en la Serie A, con 20 goles en contra y 21 a favor. También tuvieron dificultades en Europa, donde el éxito sólo llegó con un 4-0 en Zagreb, en el penúltimo partido de la ronda.
El vínculo con la temporada pasada es inmediato. En la 2021/22, el Milan se había centrado en el sprint del Scudetto fuera de casa, con un calendario monstruoso jalonado por 46 puntos en 19 partidos (14 victorias, 4 empates y una sola derrota, el 4-3 en el Franchi contra la Fiorentina). Hace sólo unos meses, el excelente rendimiento del ataque (41 goles) y de la defensa (19 goles encajados, cifra ya igualada en marzo), había sellado el mejor promedio de puntos a domicilio de la liga A (2,42).
En la comparación con el Scudetto, sin embargo, los rossoneri registraron un rendimiento ligeramente mejor en casa. Si la temporada pasada había terminado con 40 puntos cosechados en San Siro y una media de 2,11 por partido, la de hoy dice 2,20.
Para enderezar el rumbo a final de temporada y lograr su tercera clasificación consecutiva para la Liga de Campeones, Pioli deberá resolver el problema a domicilio: una de las últimas oportunidades para hacerlo llegará el sábado en el Olímpico, cuando se enfrente al Roma. Quizá pensando en los dos éxitos consecutivos, en los dos últimos partidos con vistas al Coliseo, contra los giallorossi.