Un samurái para cubrir todo el centro del campo. Tras clasificarse para la próxima Liga de Campeones, Stefano Pioli también empieza a sonreír por el Milan que llegará con la operación Kamada ya en los detalles. El jugador japonés será el primer refuerzo de la campaña de compras de los rossoneri y puede ofrecer al Diavolo diferentes soluciones. Desde el punto de vista técnico, pero también táctico.
El éxito ante la Juventus y la certeza matemática de la Liga de Campeones por tercer año consecutivo han acercado al Milan a la meta, con el adelantamiento del Atlético de Madrid y el Borussia Dortmund en el sprint final: Kamada está listo para desvincularse del Eintracht de Fráncfort tras un año estupendo, con 16 goles y 6 asistencias en 46 partidos.
Stefano Pioli había sugerido las primeras coordenadas tras el éxito en el Stadium: “¿Compras? Depende de lo que quiera hacer el club. Si el objetivo es seguir siendo competitivos en las dos competiciones y repetir lo que hicimos en la Liga de Campeones, entonces necesitamos jugadores fuertes”.
El japonés también fue elegido para ello, ya que suele apretar el acelerador en Europa, como demuestran un par de cifras. Hasta ahora, ha marcado 20 goles en 127 partidos de Bundesliga (media de 0,15), pero incluso 14 en 31 competiciones de Copa, entre Champions y Europa League (media de 0,45). No es un mal rendimiento.
El mapa de calor de su última temporada subraya de inmediato otra peculiaridad. Kamada es un “todoterreno” del mediocampo. Un jugador ‘ubicuo’, capaz de moverse con facilidad entre la mediapunta y la tres cuartos y útil tanto en la fase de construcción como en la de finalización. En la temporada promedia 50,3 balones por partido (con 5 grandes ocasiones creadas por contienda) y 1,41 disparos y 0,87 pases clave.
También es un elemento dúctil, dispuesto a ser útil al equipo incluso en la fase de ruptura (4,59 la media de balones recuperados, 1,76 la media de contras ganadas). Además de haber cubierto todas las funciones en el mediocampo (25 partidos como centrocampista, 16 como rematador), también ha sido utilizado en ocasiones como extremo izquierdo (5), en una zona del campo carente de alternativas a los destellos de Leao. Dotado de un excelente regate, es un arma extra en las incorporaciones y en las jugadas a balón parado, ya que suele lanzar penaltis (4 goles desde el punto de penalti en la temporada) y tiros libres.
Casado a los 21 años y ya padre a los 22, el japonés ha contado en el pasado que vivió una aclimatación complicada en Alemania, sobre todo en su primera temporada (2018-19): entonces, el ex seleccionador Kovac lo había descrito como un jugador elegante, muy estético y con una técnica excelente, pero con poco carácter.
Luego, con Adi Hütter el primer salto de calidad y el crecimiento continuo -también gracias a los meses cedido en el Sint-Truiden, en Bélgica- hasta la llegada de Oliver Glasner, con el gran éxito en la Europa League del año pasado y la final ganada al Rangers.
En Italia, Kamada podrá ofrecer a Pioli experiencia y puntos de vista diferentes, teniendo en cuenta también las dificultades que ha atravesado el equipo en los últimos meses. Sobre todo, podrá dar a los rossoneri una buena inyección de técnica, limpieza y orden en el medio, otros puntos nada desdeñables en cuanto a soluciones. Como buen “todoterreno”, el siguiente paso será estudiar de cerca el mundo milanista.