
A pesar de que el partido amistoso entre Juventus y Milan no fue espectacular en cuanto a nivel técnico, también y sobre todo por las numerosas faltas cometidas en la primera parte por los bianconeri, hay un jugador que saltó a los titulares por su impacto tan positivo en el partido y, en general, en los rossoneri.
Se trata de Tijjani Reijnders, que ayer por la noche saltó al campo por primera vez como titular (aunque no en partido oficial) con la camiseta del Milan. Desplegado como mediapunta izquierdo en el 4-3-3 de Pioli, el número 14 hizo gala de inmediato de la que es su principal baza: su personalidad, que ya quedó patente, entre otras cosas, en el primer balón que tocó en el equipo rossonero contra el Real Madrid, cuando intentó una volea al otro lado del campo, pero la falló.
En los amistosos se puede intentar, se pueden cometer errores, pero es la idea, el gesto, el pensamiento, el deseo de intentar jugadas de cierto nivel lo que debe ser recompensado. Y Reijnders ya se había presentado así, antes de añadir, con el partido contra la Juve, algunas indicaciones técnicas y tácticas. Porque la personalidad no sólo está en la mente y el carácter, sino que también da forma a las jugadas y los movimientos de los jugadores sobre el terreno de juego.
El holandés tiene velocidad, ritmo y visión de juego: no es un puro director, sino un constructor de juego, alguien que sabe crear ocasiones, tanto empezando con el balón en los pies como buscando a sus compañeros con pases; un ejemplo es una acción de la primera parte, cuando Reijnders, tras un control orientado y una finta con el cuerpo, dejó a dos rivales en su sitio en progresión antes de intentar un precioso pase para Giroud, que, también un poco por sus características personales, no llegó por los pelos.
La técnica está ahí, la táctica también: Reijnders sabe moverse tanto en la parte baja del campo, recogiendo el balón de los defensas, como en la zona de tres cuartos, donde varía mucho, proponiéndose constantemente a sus compañeros. Está claro que, a medida que mejore su condición físico-atlética y crezca su entendimiento con sus compañeros, su impacto en el Milan, ya de por sí muy positivo, está llamado a ser absolutamente decisivo.