El doble ex pone el balón en el centro. Cuando Giovanni Galli habla del Milan y del Fiorentina, siempre se siente como en casa. Con los Viola hizo sus primeras paradas en la Serie A, con los Rossoneri miró a Europa desde arriba. El enfrentamiento liguero es el momento oportuno para analizar el momento de los dos equipos.
¿Cómo explica los altibajos del Milan?
“Difícil de decir. Con el Lecce parecía un entrenamiento cerrado en la primera parte, pero en la Serie A no se puede conceder nada. El gran partido con el Psg afectó al planteamiento, luego el equipo se desconectó. En general, me parece que el Milan ha perdido el espíritu de trabajo del Scudetto, ese deseo de jugar cada balón hasta el último centímetro. A veces parece que todo se debe…”.
Después de tres derrotas seguidas en la liga, los Viola han vuelto a empezar.
“Cuando hablamos de la Fiorentina, hay que tener en cuenta varios parámetros. Desde la condición mental y física hasta la táctica y la agresividad. Si el equipo sale al campo llevando estos valores en el 7, siempre juega. Si sube el listón, puede ganar a cualquiera y lo vimos en Nápoles. Si baja el listón, puede perder contra cualquiera”.
Capítulo ex. En San Siro, uno de los más esperados será Bonaventura….
“Tiene calidad, experiencia y es fuerte físicamente, a pesar de tener 34 años está viviendo un momento extraordinario. Ha recuperado la selección y podría encontrar fácilmente un sitio entre los mejores equipos de la liga. El Milan hizo una elección con él, yo no hablaría de arrepentimiento. El Fiorentina aprovechó la oportunidad, le esperó y ahora disfruta de él”.
Con Giroud descartado, en el otro bando podría ser el turno de Jovic. ¿Debe el Milan seguir creyendo en él?
“Luka había demostrado que lo tenía todo para ser un gran jugador. Cuando llegó a la Serie A, pensé: ‘Vale, puede ser un gran tirador, pero tiene que recuperar su hambre’. En los últimos años le ha faltado, ni siquiera sabría decir si es una cuestión mental o física, pero parece otra persona comparado con el talento que admirábamos en Alemania. No hemos visto nada de él. Si el Milan lo recupera, puede contar con un elemento importante, pero si la situación no cambia, podríamos jugar con un tipo como Camarda. Podría ser una oportunidad para lanzarlo con menos responsabilidad. No puede haber un vacío así detrás de Giroud”.
Contra el Viola, él no estará y Leao tampoco. ¿De quién espera más?
“En este momento, jugar un partido delicado sin dos delanteros tan fuertes te puede pesar. Para el Fiorentina será una clara ventaja, pero espero que tarde o temprano los demás también abran brecha. Sobre todo Chukwueze. Hasta ahora no se le ha visto, pero el jugador observado en España puede ser entretenido”.
Cambiando de ataque, ¿cómo ve la dualidad Nzola-Beltrán?
“El prototipo de delantero perfecto para Italiano es Nzola, a Beltrán todavía no lo hemos visto. Está encontrando poco espacio, no se le dan oportunidades hasta el final. En Argentina ha demostrado que es bueno, puede tener un buen futuro. Pero hay que ponerlo a jugar cinco o seis partidos seguidos, así no se lo puede evaluar”.
Como guardameta, ¿cómo valora las dificultades de los rossoneri en las jugadas a balón parado?
“El Milan mete a sus atacantes casi dentro del área pequeña en las jugadas a balón parado, es una elección táctica. Es una elección táctica. Marcar en zona significa marcar al hombre en el área de competencia, y si no te mantienes encima de nadie te equivocas en el concepto y se complica…”.
¿Qué opina del regreso de Ibra, que cada vez está más cerca?
“Ibra es un hombre importante. Una figura carismática, que ha vivido durante años en los mejores clubes de Europa. Siempre lo querría a mi lado, pero tengo algunas dudas sobre el momento. No me convence el momento. Insertándolo tarde en el campeonato, se corre el riesgo de deslegitimar al entrenador”.