
Era un reloj de arena que corría y que, tal y como estaban las cosas, parecía claro que llegaría a su fin sin vueltas. Luka Jovic y el Milan dijeron adiós, la aventura había terminado. Los rossoneri tuvieron la oportunidad, como hace un año, de ejercer unilateralmente la opción de renovación, pero no movieron ficha. La ventana se cerró ayer, 20 de junio, por lo que el delantero centro serbio es prácticamente un jugador libre, a la espera de que su contrato expire formalmente a todos los efectos a finales de mes.
Jovic había dado importantes muestras de sí mismo en el final de temporada, concretamente en el derbi de vuelta de la Coppa Italia, cuando había condenado al Inter con un doblete que había dado la final al Diavolo. Una sacudida que había llevado a la hipótesis, entre otros escenarios, de una nueva continuación de la relación. Una eventualidad que no tuvo continuidad, también por diferencias sobre la fórmula. De hecho, el Milan le había renovado con una fórmula que permitía al club ejercer otras renovaciones estacionales de año en año, mientras que Luka pedía dos años “secos” sin opciones.
Pero es probable que las estrategias ofensivas de Tare y Allegri también estén en juego, ya que prefieren centrarse en otros perfiles. Jovic dice adiós tras dos temporadas en las que sumó 47 partidos y 13 goles, ganando la Supercopa de la Liga. Más bajones que subidas, aunque el serbio fue capaz de meter alguna rayita importante. Ahora, futuro aún por descifrar: en el plato por ahora está el interés del Cruz Azul mexicano y del Botafogo brasileño.
EL MILAN TIENE EL SÍ DE XHAKA
El Milan y Granit Xhaka han llegado a un acuerdo que debería unir pronto los destinos del centrocampista suizo de origen albanés y el club rossonero. En los últimos días, Igli Tare ha acelerado las negociaciones, con la idea de ofrecer al Bayer Leverkusen unos 10 millones de euros por el ex-jugador del Arsenal, de 32 años.
Evidentemente, falta el sí de las Aspirinas, que, sin embargo, atraviesan un verano de profunda renovación con las despedidas de Wirtz y Frimpong (Liverpool) y Tah (liberado, Bayern de Múnich). Habrá que ver si el defensa alemán Malick Thiaw puede incluirse en las negociaciones, pero de momento se habla de dos operaciones distintas. ¿La propuesta que ha recibido el sí del centrocampista? Tres años, es decir, hasta junio de 2028, 4 millones de euros más primas por temporada.
Para el suizo, ha sido una temporada quizá no al nivel de su primera en el BayArena, pero, de nuevo, habría sido prácticamente imposible repetir un doblete doméstico y una sola derrota, la de la final de la Europa League contra el Atalanta. Para él, sin embargo, 2 goles y 7 asistencias en 33 apariciones de 34 partidos en la Bundesliga, al dictado de Xabi Alonso.
Ahora está listo para seguir los dictados de Max Allegri, en un centro del campo fresco y huérfano de Tijjani Reijnders que promete ser muy musculoso para apoyar la clase de Luka Modric.
OFERTAS A LA BAJA POR XHAKA Y GUERRA
Granit Xhaka es el objetivo número uno para el centro del campo del AC Milan: el Milan está aumentando sus contactos con el Bayer Leverkusen, con el fin de convencer a los alemanes para que vendan al centrocampista por entre 10 y 15 millones de euros; no será fácil, sobre todo después de las cesiones VIP de Xabi Alonso, Tah, Wirtz y Frimpong. Por parte del Milan, está el OK del jugador suizo, con el que el club rossonero ya ha llegado a un principio de acuerdo.
No sólo Modric, no sólo Xhaka, no sólo experiencia. El Milan busca más jóvenes y el objetivo número uno es Javi Guerra. El centrocampista central del Valencia, nacido en 2003, sería del agrado del AC Milan, que quiere ficharlo y formarlo para que madure adecuadamente de cara a su impacto en la Serie A y domar un escenario como San Siro.
Pero habrá que vencer la resistencia del club español, que hace sólo un año devolvió 25 millones de euros ofrecidos por el Atlético de Madrid. Una valoración que no ha cambiado 12 meses después, pero que podría subir si el jugador firma la propuesta de renovación de contrato. El Valencia está presionando y hay una causa de fondo: el 30 por ciento que debe al Villarreal por la venta de Javi Guerra.
Según informaciones procedentes de España, la exigencia del club español ronda los 28 millones de euros. El Milan, por ahora, se queda en 20, primas incluidas. Habrá que aumentar la propuesta para traerlo al Milan.
¿Y SI VENDER A LEAO FUERA UN NEGOCIO PARA TODOS?
Rafa Leao es un hombre de 26 años, que ha sido padre hace unos meses y que, como futbolista, se encuentra probablemente en una encrucijada en su carrera. Tras seis años en Italia, en las filas de un grande histórico del fútbol italiano como el Milan, al final de la peor temporada en cuanto a resultados del equipo y, en parte, también a nivel personal, no se puede descartar la hipótesis de una separación. Entre altos y bajos, el delantero portugués ha alcanzado una dimensión importante, mostrando alternativamente destellos de clase de campeón en potencia.
En la alineación rossonera, que se ha embarcado en una peligrosa involución en lugar de construir sobre los sólidos cimientos del equipo campeón de 2022, aún queda mucho por decir del sentimiento de lo inexpresado que ha despertado incluso en los mejores años y más aún hoy, con la llegada de un entrenador como Massimiliano Allegri al banquillo.
Es un gran admirador suyo, tanto que vislumbra una evolución natural para que se convierta en un segundo delantero capaz de estar más cerca de la portería e incidir en la zona de gol. Un salto de calidad que Leao viene reclamando desde hace tiempo y por muchos iniciados, y que hasta ahora no ha llegado por muchos motivos. Por un lado, pero también achacable a una actitud un tanto perezosa del número 10 rossonero.
Y aquí es donde surge el posible dilema. El Bayern de Múnich, un club en busca de un jugador de sus características, se está moviendo entre bastidores de una forma más concreta de lo que han hecho hasta ahora los clubes de la Premier League más atentos a Leao – Arsenal y Chelsea – o los ricos equipos de Arabia Saudí. Un eventual fichaje por un club como el bávaro, acostumbrado a competir por los máximos objetivos incluso en la Champions League o en la mejor liga posible como la Premier League, podría ser un estímulo más que válido para intentar mejorar y salir de esa especie de zona de confort que son el Milan y la Serie A. Si Leao cree que puede ser un futbolista más completo que su versión actual en el futuro, ahora es el momento de demostrarlo y esta es la oportunidad que puede servir de trampolín.
Por su parte el club rossonero, que extraoficialmente no está desequilibrado pero tampoco completamente cerrado a un traspaso si se pusiera sobre la mesa una propuesta muy ventajosa (en torno a los 80-90 millones de euros), ¿qué ganaría con ese cambio? Una pérdida enorme desde el punto de vista técnico, sin duda, después de renunciar a otra pieza valiosa como Reijnders.
Un “hachazo” al proyecto que RedBird lleva dos años construyendo, aún más difícil de aceptar tras una temporada extremadamente decepcionante como la que acaba de registrar. Queriendo verlo desde otro punto de vista, la renuncia al jugador que más que ningún otro ha caracterizado la fase ofensiva del Milan en los últimos años puede ser una forma de romper ciertos esquemas e intentar ir más allá, hacia algo inédito y sorprendente.
Serán semanas delicadas, de observación, de profunda reflexión para un jugador en la cima de su carrera pero quizá en busca de una respuesta a sus interrogantes y a las expectativas de quienes creen que aún puede ser un campeón a la altura de las estrellas del fútbol europeo. Y de un club, el Milan, en busca de su nueva identidad, probablemente con protagonistas diferentes.