
No sólo Tijji, que ahora extiende los brazos a los aficionados tras los goles con cierta despreocupación: hace dos noches lo hizo por 15ª vez esta temporada. Otra gran cifra que atrae a la afición rossonera: 2030, la relativa a la expiración de su contrato. Tijjani Reijnders, Tijji para el equipo y el entrenador, es la primera gran certeza del nuevo Milan. No es la única: a pesar del camino lleno de baches en la liga y en la Liga de Campeones, el camino del que partir está ampliamente trazado.
Hay un centrocampista goleador, un jugador de campo de calidad y enjundia (Pulisic, próximo a renovar hasta 2029), dos centrales jóvenes y complementarios (Thiaw, diestro, y el zurdo Pavlovic), y luego más goles: los del eterno bombardero de recambio, Jovic, los del futuro (garantizados por Camarda, primer doblete el miércoles en el C) y los que se esperan de Giménez. Sin olvidar a Maignan, Theo y Leao: tardes como la del derbi pueden indicar más claramente la dirección a seguir.
La noche del éxito sobre el Inter cuenta con la firma de Luka Jovic: el delantero excluido de la lista Champions que mantiene abierta al Milan la posibilidad de volver a Europa desde la Coppa Italia. Europa también significa ingresos: y a la espera de que Giménez devuelva las expectativas (y los gastos), y de que se tome una decisión sobre el futuro de Abraham (veinte millones para recomprarlo a la Roma), cabe recordar que Luka, verano de 2023, había llegado en cesión gratuita.
También por eso espera que el club cumpla su deseo contractual: el Milan tiene una opción de renovación de un año (ejercitable, verano tras verano, hasta 2028), mientras que el delantero querría al menos una prórroga inmediata de dos años. Por los goles garantizados del nueve del alijo (13 en total), valdría la pena. Por la inversión realizada en invierno, el club también insistirá en Giménez: mientras Jovic firmaba un doblete en el Inter, Santi se quedaba en el banquillo. Sólo siete minutos contra el Atalanta en el último partido del campeonato. Más datos reconfortantes: además de los tres con el Milan, Giménez marcó 65 goles en Holanda y ocho en 11 partidos de Liga de Campeones. Números de un gran delantero.
Podría volver a encontrar el camino del gol, si el equipo repropusiera ciertos patrones de juego, por ejemplo los que llevaron a la primera ventaja en el derbi: centro de un jugador exterior (hace dos noches Jiménez) y cabezazo del delantero centro (entonces Jovic). En las bandas el Milan tiene otro talento, que puede actuar como diez: Pulisic es la otra seguridad del equipo que viene. El identikit también corresponde a Leao, el verdadero 10 del equipo: en la noche de copa entró en la acción de doblaje y sirvió la asistencia del tercer gol, mientras que en la primera parte había sido insuficiente.
Rafa es así: discontinuo, en el mismo partido y más aún a lo largo del año. Calidad demostrada, le falta estabilidad en el rendimiento: el inestable Milan de este año seguro que no le ayudó, pero la reanudación tendrá cimientos más sólidos. El otro viejo líder es el capitán Maignan: si está “satisfecho” con cuatro millones y medio al año, la ampliación con el Milan será un trato hecho.
Un acuerdo para todos: para Mike, que tendrá un contrato más rico y más largo, y para el club, sobre todo si el portero confirma que ha vuelto a encontrarse a sí mismo. Queda Theo: la línea del club es clara. No hay renovación, se buscará comprador en verano. La única excepción a la regla: un entrenador que responda por él.