
Tercera derrota consecutiva y además en un San Siro que acabó vacío como protesta por la mala actitud de los jugadores y para enviar una señal a la directiva del mal trabajo realizado este verano, tuvo que haberse realizado una limpia de la plantilla que se ha quedado a medias y aquí están los resultados, más cerca del descenso que de la gloria.
ALINEACIONES OFICIALES

PRIMERA PARTE
Fue la Fiorentina la primera en avisar a través de Chiesa en el 10′, donde hizo trabajar a Donnarumma al tener que meter el cuerpo para despejar a córner. Era el primer aviso de lo que iba a venir, cuando en el 12′, tras una genial internada de Ribery dentro de la defensa, intenta superar a Gigio pero despeja con el cuerpo, pero Bennacer comete un claro penalty sobre Chiesa que el árbitro no duda en pitar (amarilla para el argelino).
Pulgar ejecuta a la perfección la pena máxima para hacer el 0-1, terribles minutos de Bennacer no solo por el penalty, sino por la pérdida de varios balones que generaron peligrosos contragolpes, pero también la defensa fue un flan en las primeras internadas del club viola.
A decir verdad, salvo las subidas de Kessié, el Milan apenas si pasaba del centro del campo, cometiendo errores que enfurecieron al público. De hecho los de Montella volvieron a marcar en el 28′ a través de Castrovilli, pero la jugada quedó anulada por claro fuera de juego de Chiesa.
El Milan era un mero títere a manos del club viola, intentaron salir y hacer jugadas, de hecho se pidió penalty sobre Piatek en el 31′ cuando fue sujetado por Cáceres en una lucha entre los dos con la caída del polaco, pero ni el árbitro ni el VAR quisieron tomar cartas en el asunto, cuando algo de duda hubo al menos.
Leao era realmente de los pocos que ofrecían algo nuevo e impredecible, mientras el resto del equipo se mantenía impávido sin saber como reaccionar, con tan solo dos remates a puerta (con cero peligro) acabó la primera parte con la victoria por la mínima de la Fiorentina pero que controlaron bastante bien el encuentro.
Todo el estadio silbó al equipo de manera unánime ante una de las peores prestaciones, nada de lo visto en la primera parte ante el Torino, al contrario, un paso atrás brutal en rendimiento y en actitud, aquí no se puede decir que sea solo cosa del entrenador, los jugadores tienen una gran parte de culpa, donde parece que le están haciendo la cama al técnico para que se marche…

SEGUNDA PARTE
Curioso cambio el que hace Giampaolo, bastante inesperado, con la salida de Kessié (no es que brillara precisamente el marfileño) para que debutara esta temporada el bosnio Krunic por primera vez esta temporada con la camiseta del Milan.
Pero el Milan se quedó con diez tras la roja directa a Musacchio por agresión a Ribery, el árbitro primero sacó la amarilla, pero el VAR avisó que pudo ser agresión y tras varios minutos revisando el monitor, expulsó al central argentino, donde llegó el turno del debut del brasileño Duarte en el 57′, quitando del campo a Piatek para dejar a Leao como delantero centro.
Como a todo perro flaco son pulgas, ¿qué tal un 0-2 en el 66′ gracias a un grave error de Calhanoglu cerca del área donde además Donnarumma despeja mal al centro para que Castrovilli marque a placer? Por si faltara poco, Bennacer comete un inocente penalty que intenta marcar Chiesa pero lo para Donnarumma para evitar así una goleada escandalosa.
El equipo ya dejó de existir sobre el campo tras la expulsión de Musacchio, no había mucho más que hacer, donde Ribery en el 77′ hizo el 0-3 en un rápido contragolpe y con una facilidad pasmosa dentro del área pequeña, momento en el que fue Suso tremendamente pitado por todo el estadio para que entrara Castillejo como tercer y último cambio.
Leao hizo el 1-3 en el 80′ en una gran jugada del portugués donde se marchó de cuatro rivales y con un remate cruzado marcó, de lo poco realmente positivo hoy, donde no descarto que acabe sentando a Piatek y ocupe esa posición de delantero centro, siempre y cuando Suso y Calhanoglu desaparezcan de este equipo, obviamente.
Leao aparte de hacer gol, fue el único de todo el equipo en buscar desbordes, ganar faltas cerca del área, meter miedo a los rivales, generar acciones de peligro, siendo para mí sin duda el mejor del equipo, su fichaje no será en vano, pero no se puede pensar que un jugador haga todo el trabajo, un 1-3 que pudo haber sido bastante más amplio, pero aquí como siempre, nada sucederá…
MI OPINIÓN
Me dijeron que no era racional por pedir el despido de Giampaolo tan pronto, cuando fue el primero en querer cambiar el 4-3-1-2 tras la derrota ante el Udinese, cuando se perdió ante el Torino lo mismo, se decía que había que tener paciencia, luego perder ante el Inter y hoy contra la Fiorentina, pero el problema va mucho más allá por desgracia.
Echar al entrenador ya no sirve de nada cuando ves que los jugadores ya no sienten esta camiseta, que no corren ni se mueven en el campo, los ves quietos sin ninguna intención de hacer nada salvo el bueno de Leao más las buenas intenciones de Bennacer (que no ha tenido su día precisamente), el resto, cuando ves que Donnarumma ya no es tan seguro como antes, que la defensa es un coladero, que Suso es un muerto andante al igual que Calhanoglu y que Piatek se ha convertido en su peor enemigo, es que algo va mal.
Gattuso hizo lo que pudo hasta el final, pero en la parte final de la pasada temporada tras sumar tantos malos resultados se pudo ver que el técnico hizo lo que pudo, pero son los jugadores los que si no luchan, todo estará en vano, si de once solo tres o cuatro lo intentan pero el resto pasa, no hay entrenador que pueda cambiar eso, salvo que cambies el once por completo, algo que de lo que sí podemos acusar a Giampaolo es de seguir abusando de Kessié, Calhanoglu y Suso, jugadores que ya no aportan nada a este club, salvo reproches e intentos de renovación para cobrar más dinero.
El entrenador morirá con las botas puestas, pero aunque se vaya, dejará al equipo luchando por no descender y con Gattuso muy cerca del Genoa (el próximo rival del Milan, cosas del destino), con Montella que bien se reía tras el resultado final, como una dulce venganza.
La directiva también tiene gran parte de culpa por traer jugadores que primero no parece que encajaran muy bien con la mentalidad del técnico, sobre todo viendo lo que ha tardado en ponerlos, parecen más bien parches para cubrir huecos, jugadores inadaptados tanto al sistema como al club.
Puede parecer utópico lo que voy a decir, pero quizás es hora de que el Milan desaparezca como club y se marche a la Serie C a empezar de cero, una cura de humildad por la que ya pasaron Fiorentina y Parma, pasando los años que necesitan para construir un nuevo estadio en las ligas inferiores, sin la presión de Europa ni tener que fichar jugadores por fichar, para llegar a la élite de la Serie A como un equipo rejuvenecido, viendo que han pasado tres directivas consecutivas y nadie ha atajado el problema de raíz.
Y así nos dejaremos de preocupar de esta panda de vagos bien pagados y volver a disfrutar de lo realmente importante: del fútbol en su totalidad, porque a estas alturas, quizás sea mejor descender y que se marchen todos aquellos que tanto daño le están haciendo al club, porque hay que recordar lo básico: nadie es importante, siempre quedará el club, quien pase y quien se vaya no es importante, pero lo que estamos viendo solo sirve para generar un mayor daño.
La marcha de la Curva Sud del estadio y de la mayoría de la gente en las gradas es un claro síntoma de que hasta aquí hemos llegado, se ha tenido paciencia durante muchos años viendo los mismos resultados: quizás haya que dar todos un paso atrás y dejar que el club se hunda en su propia miseria para que renazca como un ave fénix… parece el único camino posible en estos momentos.