
Un talento portugués, que empezó en el Sporting de Lisboa antes de pasar al Lille y convertirse después en una oportunidad de mercado: éste no es el resumen de la vida profesional de Leao, sino otra historia que puede tener un desarrollo rossonero. El protagonista es Tiago Santos, de veintidós años, también un hombre de banda: ni delantero ni lateral izquierdo, sino lateral derecho con labores de cobertura y calidad en las internadas ofensivas. Características que el Milan ya había notado en su temporada de debut en la Ligue 1, 2023-24: 29 partidos y un gol.
Mucho menos afortunado fue el recién concluido campeonato: el pasado octubre sufrió una rotura del cruzado de la rodilla izquierda. Tras los siete primeros partidos, siempre sobre el terreno de juego, pasó a la enfermería y allí terminó la temporada. Si el talento sigue siendo el mismo, podría convertirse en una ganga debido a los últimos acontecimientos: la altísima valoración que hacían de él en Francia antes de la eliminatoria ronda ahora los 15 millones.
Una cantidad que el Milan puede pensar en negociar más: es cierto que será necesario un periodo de trabajo atlético para volver a estar en plena forma y luego otro para integrarse en el grupo, pero en las condiciones económicas adecuadas puede merecer la pena esperar. Tiago Santos ha disputado 56 partidos y ha marcado 4 goles con el Lille, ya ha debutado en la Liga de Campeones y ha acabado en la selección portuguesa.
Un banquillo entre los grandes y cinco partidos con la sub-21. El Milan se había puesto en contacto con él hace un año, sugerido por su compatriota y ex seleccionador Paulo Fonseca, entonces primer entrenador de la temporada rossonera. No era el momento adecuado para el acuerdo.
¿Podría ser ahora? En las condiciones que el Milan estime oportunas, sí. Tiago Santos sólo podría ponerse a disposición de Allegri cuando esté totalmente recuperado. Pero entonces ofrecería calidad y velocidad, buena cobertura y participación en la fase ofensiva: lo mejor del repertorio de un lateral moderno. Lo que el equipo necesita: además del lateral izquierdo, también se renovará el lateral derecho. A día de hoy, ambas están bastante vacantes: Theo Hernández está ahora en excedencia con el club -él y el club sólo esperan la oportunidad que los una a todos-, mientras que en la derecha, Walker, que no fue repescado por el City, está prácticamente descartado.
Y Emerson Royal está de salida. Queda Álex Jiménez, suponiendo que el Real Madrid no decida ejercer su opción de recompra: una posibilidad remota a día de hoy. Saelemaekers, si Allegri vota por quedárselo tras su cesión en el Roma, puede ser útil, pero no es un verdadero lateral, como tampoco lo es Terracciano, que podría marcharse a entrenar una temporada. Florenzi está al final de su contrato: en consecuencia, también se necesitan refuerzos en la derecha. Y Tiago Santos es una idea: en las próximas semanas podría convertirse en algo más concreto.
GUDMONSSON OFRECIDO A MILAN Y ROMA
La Fiorentina no ejercerá su rescate de 17 millones antes del 24 de junio, pero no renuncia a Albert Gudmundsson. Se espera una reunión con el Génova a mediados de la próxima semana: en el clan morado se está valorando la renovación del oneroso préstamo.
La primera temporada de Gudmundsson en Florencia no estuvo a la altura de lo que se esperaba: 6 en 24 apariciones en la Serie A, sólo 2 en 8 apariciones en la Conference League. Albert no pudo expresar toda su clase porque le penalizaron muchas lesiones. Pero las dudas moradas dependen sobre todo de un proceso judicial en su país (el veredicto final no se espera hasta el próximo mes de octubre).
Albert es un jugador polivalente, un ’10’ decisivo que había estado cerca del Inter en el pasado. Roma, Atalanta y, sobre todo, Bolonia han pedido información al Génova y a su entorno. Gudmundsson tiene un buen mercado en la Serie A y está destinado a quedarse en nuestra liga, sea o no la Fiorentina.
Podemos contarte una exclusiva entre bastidores: una cumbre de mercado entre el agente de Gudmundsson y Tare tuvo lugar en Casa Milan en los últimos días. Se ofreció a los rossoneri al mediapunta islandés de 28 años en condiciones favorables: el Génova estaría encantado de llegar a un acuerdo con el Milan. De momento, sin embargo, la respuesta fue fría, posiblemente hablaremos de ello más adelante.