7 fichajes y 15 ventas

Siete futbolistas fichados, quince cedidos. Y en el cálculo no figuran los cinco jugadores (Saelemaekers, Bennacer, Adli, Okafor y Lazetic) que regresaron de cesiones en otros clubes y siguen siendo propiedad del equipo, además de los siete que salieron de Milanello como agentes libres (Florenzi, Jovic y Vasquez) o por no haberse ejercido la opción de compra (Walker, Joao Felix, Sottil y Abraham).

En total, hablamos de treinta y tres atletas «movidos», en un sentido u otro. Todavía quedan más de dos semanas para que termine el mercado de fichajes, y al menos otro fichaje seguro en ataque (lo comentamos aquí al lado), pero el verano del Milan ya se puede resumir con una palabra: revolución. Por otra parte, tras quedar octavo en la liga y una temporada que, a pesar del primer trofeo de la era RedBird (la Supercopa de Italia ganada en Riad), calificar de decepcionante es quedarse corto, se necesitaba un cambio de rumbo decisivo. Y antes incluso de saltar al campo, el Diablo ya había cambiado de piel fuera de él: Igli Tare como director deportivo y Massimiliano Allegri como entrenador. Dos figuras clave en el rediseño del equipo.

Hasta ahora, el Milan ha gastado solo en fichajes 102,5 millones de euros, que con las bonificaciones podrían convertirse en 111,5. ¿Las inversiones más importantes? En el corazón de cada formación, el centro del campo. Ardon Jashari es el fichaje más caro (34 millones más tres de bonificaciones al Brujas), Samuele Ricci el segundo (23 +2 al Torino). Además, el fichaje estrella a coste cero, Luka Modric, que ha devuelto el Balón de Oro a Italia: el último fue Cristiano Ronaldo. Por supuesto, en el centro del campo, el Diablo también ha cedido a una de sus piezas más preciadas, Tijjani Reijnders, por el que el Manchester City de Guardiola ha pagado 57 millones más 15 de bonificaciones. Pero toda revolución conlleva sacrificios dolorosos.

Otras zonas que han cambiado por completo son los laterales defensivos. A la izquierda, Theo Hernández (25 millones del Al Hilal) y Pervis Estupinan, el primer ecuatoriano en la historia del Milan. Mientras que de los laterales derechos de 2024-25 (Emerson Royal, Calabria, Florenzi, Walker y Jiménez) solo queda el joven español exjugador del Real Madrid (Jiménez, precisamente).

A cambio, Tare ha apostado fuerte por Zachary Athekame (se hará oficial hoy) y el regreso de Alexis Saelemaekers tras su cesión al Roma, además de querer al versátil Koni De Winter (20 millones entre parte fija y bonificaciones), al que Allegri ya entrenó en la Juventus antes de que se trasladara al Genoa. Sin embargo, el belga es sobre todo un central y no es casualidad que haya sido fichado rápidamente (en menos de 48 horas) tras la marcha de Thiaw, que se fue al Newcastle por 40 millones.

El resto En ataque, se espera al nuevo delantero centro. Mientras que en cuanto a las cesiones, aún faltan al menos tres piezas: Bennacer, Adli y Lazetic, de hecho, no forman parte de la plantilla del primer equipo y están oficialmente en el mercado a la espera de un nuevo destino. Tare también ha trabajado mucho con los jóvenes (desde Camarda y Comotto, cedidos respectivamente al Lecce y al Spezia, hasta Liberali, cedido al Catanzaro con el 50% de su futura reventa) y ha logrado resolver situaciones espinosas (desde Emerson Royal, cedido al Flamengo, hasta Morata, que regresó del Galatasaray para acabar en el Como). La revolución está casi completa, solo falta el último esfuerzo.

UN SPRINT POR HOJLUND

Ha llegado el momento de acelerar. El Milan y el Manchester United están trabajando para llegar a un acuerdo sobre el traspaso de Rasmus Hojlund al equipo rossonero. Si bien los Red Devils ya aceptaron hace una semana la fórmula (cedido con opción de compra), ahora los dos clubes deben ponerse de acuerdo sobre las cifras. El Diablo partía de una valoración total de unos 40 millones, mientras que el United llegaba incluso a los 50.

Sin embargo, ambos saben que deben ceder en algo para que el acuerdo salga adelante, llegando a un término medio de alrededor de 5 millones de euro en concepto de préstamo oneroso y algo menos de 40 millones en concepto de rescate. En una cosa, sin embargo, los dos equipos están de acuerdo: es hora de que Hojlund cambie de aires. En Manchester ya se lo han hecho entender al danés, primero al no alinearlo en el partido amistoso contra la Fiorentina y luego diciéndoselo claramente en una conversación cara a cara con el propio jugador.

Por si fuera poco, habrá que estar atentos a las decisiones de Ruben Amorim en el primer partido de liga del domingo en Old Trafford contra el Arsenal: en Inglaterra aseguran que Rasmus está claramente por detrás de Sesko, Cunha, Zirkzee y Mbeumo en la jerarquía del técnico portugués. Por lo tanto, incluso corre el riesgo de no ser convocado.

Por su parte, el Milan se puso en contacto el martes por la noche con los representantes (y el padre Andrés) de Hojlund para confirmar su intención de ficharlo para el San Siro, recibiendo la aprobación general del delantero. El danés aprecia el club milanés por su tradición y le atrae la oportunidad de trabajar con Massimiliano Allegri, pero claramente quiere tener garantías sobre el proyecto de los rossoneri a su alrededor.

No tanto desde el punto de vista económico (el Milan ya se ha mostrado dispuesto a cubrir íntegramente el salario actual de Rasmus, algo menos de 4 millones al año), sino desde el punto de vista puramente técnico. En este sentido, Hojlund querría garantías sobre la posibilidad de ser rescatado dentro de un año, en caso de que su aventura en Milán fuera positiva. Con una obligación fijada al alcanzar los objetivos o con una cifra que deje margen al Milan para ejercer el derecho.

Desde el punto de vista de Igli Tare y los responsables del mercado de fichajes de Via Aldo Rossi, la llegada del nuevo delantero estaba prevista para la semana previa al inicio del campeonato, el próximo sábado en San Siro contra el Cremonese. La esperanza sigue siendo cumplir con el objetivo, pero las negociaciones por Hojlund no parecen estar en la recta final, por lo que el Milan se ve obligado a mantener vivas también las posibles alternativas, para evitar sorpresas.

Ayer, los medios ingleses hablaron del interés por el danés del Fulham, pero en segundo plano también hay que prestar atención al Borussia Dortmund: hasta que no se cierre el acuerdo, Hojlund sigue siendo codiciado por otros equipos. ¿Y si al final el delantero del United no llega? La opción más sencilla llevaría a Lecce, a Nikola Krstovic, mientras que para perfiles como Nico Jackson habría que esperar a que el Chelsea aceptara la cesión. Lo mismo ocurre con Dusan Vlahovic, el favorito de Allegri, cuyas condiciones son accesibles tanto en cuanto al precio del traspaso como al salario. Por último, hay que estar atentos al Atlético de Madrid, que está dejando marchar al noruego Alexander Sorloth.

OFICIAL: ATHEKAME AL MILAN

Como se ha mencionado, la operación se cerró sobre la base de una transferencia definitiva por 10 millones de euros, con un porcentaje sobre la futura reventa a favor del club bernés. El Milan se decantó por un perfil más prometedor, como el del jugador nacido en 2004, porque las negociaciones con el Estrasburgo por el marfileño Guela Doué no llegaron a buen puerto. En consecuencia, los rossoneri han reservado más de diez millones de euros para otros refuerzos, aprovechando la presencia en la plantilla de Saelemaekers y Jiménez, jugadores muy versátiles en la banda.

En su carrera, tras su paso por el Neuchatel Xamax, Athekame fichó el verano pasado por el Young Boys, convirtiéndose rápidamente en uno de los pilares del equipo suizo: ha disputado 30 partidos en la liga (con 2 asistencias), 5 en la Copa de Suiza (con 1 gol y 1 asistencia) y ya 8 en la Liga de Campeones. Además, Athekame ha disputado 10 partidos con la selección suiza sub-21.

ALLEGRI PIDE DOS FICHAJES MÁS

El Milan, según se lee en las páginas de la edición de hoy de TuttoSport, está listo para los dos últimos fichajes que ha solicitado Massimiliano Allegri para completar la plantilla: un delantero de peso (prioridad absoluta) y un defensa central, con vistas a un posible cambio definitivo a la defensa de tres.

Para la defensa se podrá esperar hasta los últimos diez días de negociaciones, buscando oportunidades de última hora. Los ojeadores rossoneri están siguiendo varios perfiles: Caleb Okoli (Leicester), el pupilo del director deportivo Tare Berat  Djimsiti (aunque el Atalanta lo considera intransferible) y el joven Ryan Flamingo (PSV), además de otros nombres que se están evaluando.

La elección también dependerá del presupuesto. Si el Milan lograra fichar a Rasmus Hojlund en calidad de cedido con opción de compra, parte de los fondos restantes podrían destinarse precisamente al defensa. Actualmente, los centrales de la plantilla son Tomori, De Winter, Gabbia y Pavlovic: en caso de pasar a una línea de tres, se pone de manifiesto la necesidad de traer a Milanello a otro defensa.

Las negociaciones por el delantero danés están en curso: el United pide garantías y hay que destacar el interés del Leipzig y el Borussia Dortmund, pero el jugador parece preferir el regreso a la Serie A, donde destacó con el Atalanta en 2022/23: así lo creen su agencia y también su padre Anders, que sigue siendo su principal asesor.

El Milan está dispuesto a ofrecer un préstamo oneroso de 5 millones, con derecho de rescate entre 40 y 45 millones: la confianza en traerlo de vuelta a Italia aumenta. Paralelamente, la directiva mantiene abiertas otras vías: Vlahovic (Juventus), Dovbyk (Roma), Krstovic (Lecce) y Jackson (Chelsea), en caso de que no se llegue a un acuerdo con Hojlund.

También en cuanto a salidas, serán días intensos y llenos de trabajo: el Nottingham Forest está dispuesto a ofrecer 30 millones por Musah, cifra fijada por el Milan para dar luz verde. También es posible la salida de Okafor, solicitado por el Leeds, mientras que las negociaciones con el Fulham por Chukwueze están estancadas. Magni, protagonista en verano, irá cedido al Cesena, mientras que Coubis gusta al Avellino, Sampdoria, Cluj y KS Cracovia.