Todo gira alrededor de Modric

Todo lo que toca, se convierte en oro. A pesar de haber cumplido cuarenta años el pasado 9 de septiembre, Luka Modrić sigue deslumbrando como siempre lo ha hecho a lo largo de su carrera. Llega probablemente tras su actuación menos brillante con la camiseta del Milan —en Bérgamo cometió un par de errores poco habituales en él—, pero aun así presenta números impresionantes: toca más balones que nadie en la Serie A, intenta más pases, completa más (tanto en total como en campo rival) y recibe más que cualquier otro jugador.

Datos aún más significativos si se considera que el Milan no es un equipo dominante en cuanto a juego o posesión. Además, corre muchísimo, con un promedio de unos diez kilómetros por partido.
A su edad, no era —ni es— algo que se dé por sentado. Pero quizá ese sea el punto de partida equivocado: Luka es uno de esos futbolistas para los que la edad es solo un número y la clase es lo único que realmente importa.

De eso se ha dado cuenta perfectamente Massimiliano Allegri, un técnico que entiende de campeones: en su carrera ha dirigido a figuras como Cristiano Ronaldo, Ibrahimović, Pirlo, Seedorf, Thiago Silva, Dybala, Pogba y muchos más. Cuando en junio le dio el “sí” a Igli Tare, aceptando un sueldo bajo para alguien de su nivel (3,5 millones netos por un año, con opción de prórroga), Modrić tenía muy claro el papel que quería desempeñar en el que había sido su club del corazón desde niño: ser protagonista y ganar.
Por eso, al director deportivo rossonero —que tuvo la intuición de ficharlo a coste cero— le pidió garantías sobre la competitividad del plantel y las ambiciones del club.

Allegri entendió enseguida que a un jugador como Luka no se le puede dejar fuera, y en el campeonato —sin compromisos europeos entre semana— lo ha alineado siempre como titular: en el equipo, solo Gabbia (810 minutos) ha jugado más que el croata (785’). No se trata de un homenaje a un futbolista quizá en su última temporada, sino de una elección dictada por su rendimiento en el campo. Por ejemplo, Modrić es el jugador con más balones tocados en las primeras nueve jornadas de la Serie A: 748, por delante de Di Lorenzo (717) y Bastoni (714).

Luka también lidera las estadísticas de pases intentados (606, es decir, 67 por partido; seguido por Bastoni con 554 y Solet con 549) y de pases completados (559, 62 por encuentro; detrás, Bastoni con 491 y Solet con 489). ¿Fin de la lista? No. El ex del Real Madrid es también primero en pases completados en campo rival (324, frente a los 285 de Barella y los 256 de Di Lorenzo).

En resumen: acompaña la jugada, abarca mucho campo y siempre se ofrece para recibir el balón, incluso cuando “quema” y la presión rival es intensa. Y si hablamos de pases recibidos, también es líder con 508, superando a Bastoni (499) y Barella (475). Más pruebas de su importancia llegan de otras clasificaciones:

Pases al área rival: 5.º con 51 (lidera Dimarco con 75). Ocasiones creadas: 4.º con 20 (a uno de Barella y a seis de Nico Paz). Sus pases, precisos y variados, se combinan con su conducción del balón: lo ha llevado al menos cinco metros en 159 ocasiones, siendo segundo solo tras Solet, que además juega bajo menos presión. Una clara señal de la confianza que le tienen sus compañeros.

Modrić es hoy la pieza clave del Milan, un futbolista total e insustituible que, tras el parón, ha sabido “ocultar” de algún modo la ausencia crucial de Rabiot y aportar también en fase defensiva.
Para comprobarlo basta mirar las cifras: 5.º en balones interceptados (14; primero Mancini, de la Roma, con 17). 2.º en posesiones recuperadas (54; solo superado por Masini, del Génova, con 56). Nada mal…

Ha sido elegido mejor jugador de septiembre por la Asociación Italiana de Futbolistas (AIC), premio votado por sus propios colegas, algo que le ha hecho especial ilusión. Lo recibió en Milanello, y tras no haber brillado en Bérgamo, ahora tiene un motivo más para hacerlo bien. En Milán se encuentra de maravilla y vive en el centro con su familia. Su hijo Ivan ha hecho algunos entrenamientos con el equipo Sub-16 rossonero, mientras que su hija Ema podría incorporarse a la Sub-14. No aportarán lo mismo que el padre… pero ya se sabe: la buena sangre no miente.

LEAO SE RECUPERA ANTE LA ROMA

Ayer en Milanello no hacía sol, pero la radiante sonrisa de Rafa Leao se encargó de poner a todos de buen humor. El portugués volvió a entrenar con el grupo, repartiendo abrazos y risas a sus compañeros, como lo demuestran las fotos que inevitablemente se publicaron en las redes sociales. Una en particular lo muestra junto a Christopher Nkunku, y Leao la acompañó en Instagram con el emoticono de un apretón de manos.

¿Una señal de acuerdo de cara al partido de mañana por la noche contra la Roma? A la luz de la (muy) probable ausencia de Santiago Giménez, los dos podrían formar pareja desde el primer minuto, siempre y cuando el problema en la cadera no vuelva a molestar a Rafa en la sesión de hoy o en el entrenamiento de hoy. El martes, el dolor le afectó durante los 45 minutos que jugó en Bérgamo, impidiéndole correr como de costumbre y convenciendo a Massimiliano Allegri de sustituirlo en el descanso por Nkunku.

Dúo inédito Por suerte, sin embargo, Leao parece estar ahora mejor, hasta el punto de que se le puede considerar oficialmente recuperado para el partido contra la Roma. Allegri lo evaluará en el entrenamiento de hoy y decidirá si lo alineará o no como titular mañana. Las señales de ayer, sin embargo, son muy alentadoras en este sentido. Así, podríamos ver por primera vez desde el minuto 1 a la pareja Rafa-Nkunku. De hecho, los dos solo han estado juntos en el campo durante el partido, 16 minutos en casa de la Juventus y 14 minutos contra el Pisa.

El martes por la noche, Leao, al igual que todo el Milan, sufrió mucho la asfixiante presión del Atalanta en la primera parte. La Roma tiene el índice PPDA, que mide la presión sobre la maniobra del rival, más bajo de la Serie A. En esencia, es el equipo que más presiona en la liga.

Pero no cuando Soulé y Dybala están juntos en el campo. Por lo tanto, el partido de mañana podría dar un poco más de respiro al juego del Milan y, por ello, Allegri podría verse obligado a alinear a dos delanteros puros (Rafa y Nkunku) muy juntos, en lugar de apostar por un delantero centro apoyado por un falso delantero (Loftus-Cheek) detrás.

Sin embargo, si hay un jugador que trasciende las discusiones tácticas, ese es Leao. El portugués, gracias a su gran poderío físico y su genialidad técnica, es capaz de encenderse de la nada, pero también de perderse en un vaso de agua cuando se le pide que cargue con el equipo a sus espaldas. Precisamente, el historial de sus enfrentamientos contra la Roma es indicativo.

En el último encuentro en San Siro con los giallorossi, Rafa se quedó en el banquillo. El 1-1 final le costó el puesto a Paulo Fonseca. Sin embargo, la Roma también evoca buenos recuerdos para Leao. En el año del scudetto, por ejemplo, el gol marcado a Rui Patricio el día de la Befana bajo la curva sur rompió una sequía de más de dos meses y lanzó al portugués hacia una segunda parte de temporada extraordinaria, convirtiéndolo en el factor determinante para la conquista del tricolor.

El otro gol marcado contra la Roma en 14 enfrentamientos se remonta al 1 de septiembre de 2023, pero esta vez en la victoria por 2-1 en el Olímpico. Sin embargo, en la misma temporada, los giallorossi eliminaron al Milan de Europa, con Rafa en la sombra y criticado.