
A la espera de Jashari, el Milan se tomará su tiempo con otras grandes compras: un defensa central, un par de laterales titulares, un delantero centro que comparta tareas de área con Giménez. Lo primero, por orden de necesidad técnica, son los laterales. Así, el club se ha lanzado a por Guéla Doué, del Estrasburgo, con una oferta oficial de 15 millones: los franceses piden 20 y la distancia puede interpretarse como estrecha (si hay voluntad de llegar a un acuerdo sobre primas en los próximos días) o insalvable, si cada parte mantiene su postura.
Más proclive a mover ficha es el Milan, que añade recompensas ligadas al rendimiento personal y del equipo. En realidad, el trato con el Estrasburgo es complejo: el club pertenece a BlueCo, al que también pertenece el Chelsea. No necesitan vender con descuento, aunque Doué, por el que pagaron seis y medio en el Rennes sólo el verano pasado, ya garantizaría una plusvalía decente. Guéla cumplirá veintitrés años en octubre, nació en Francia pero juega con Costa de Marfil. Tiene un hermano “querido”, Desiré, extremo del Psg que marcó un doblete contra el Inter en la final de la Liga de Campeones. Así que, por “razones familiares”, Guéla sería bien recibido en Milán. Negociación a seguir.
En la izquierda, con Leao habiendo hecho efectivamente oficial el traspaso árabe de su amigo Theo, el club tiene la misma necesidad de intervenir. Todavía buscando en el extranjero, una pista lleva al Girona: Miguel Gutiérrez, 23 años, juvenil en el Real Madrid y diez apariciones en el primer equipo. Luego se fue al Girona para consolidarse: 112 partidos y seis goles. Una buena base de experiencia en un perfil aún joven y con proyección. A día de hoy los titulares de Allegri son Jiménez y Saelemaekers, con Terracciano como posible alternativa. Está claro que hacen falta refuerzos: el nuevo lateral izquierdo podría adelantar a Doué (o a quien sea) y engrosar la plantilla rossonera incluso antes que el lateral derecho.
En el centro de la defensa, Giovanni Leoni es el talento que Allegri sigue con mayor interés: Max podría convertirlo en uno de los grandes centrales de la selección, al nivel de los campeones defensivos con los que trabajó primero en el Milan y luego en la Juventus. Antes incluso de que empiece la temporada, ya hay un derbi con el Inter, que querría llevar al central del Parma a los nerazzurri.

Entre medias, el Milan espera la respuesta del Brujas a la oferta de más de 30 millones por Jashari. Parece sólo cuestión de días. No hay plazo, pero el mercado tiene su propio calendario. Ayer ds Tare habló al respecto: “Es una situación abierta. Su voluntad es venir a jugar a este equipo, pero ahora mismo tenemos que respetar la dinámica de otro club, el Brujas. Creemos que hemos hecho una gran oferta, respetuosa con la historia del club y del fútbol belga. Espero que haya un final feliz para el Milan y para el jugador”.
La dinámica que afecta al Brujas puede tener que ver con la necesidad belga de comprar un sustituto antes de dejar marchar a Ardon, que ahora está descontento y sólo se conforma con la idea de vestir la camiseta rossonera. También llegará otro delantero, uno que quite presión a Giménez y al mismo tiempo eleve el nivel de competitividad ofensiva.
El mercado de delanteros es especialmente volátil, por lo que no se descarta que el Milan espere un poco más antes de dar el golpe. En agosto podría haber gangas especialmente interesantes. El tiempo también juega a favor del Milan en la operación de Vlahovic, que lastra el presupuesto de la Juve con sus 12 millones de euros de salario.
Allegri se fija en otros valores: “Dusan es un chico extraordinario, le he visto crecer. Pero es un jugador de la Juve y no hablo del mercado”. Con una ficha así, el Milan sólo se plantearía comprarlo si fuera inesperadamente barato. Y cuanto más tiempo pasa sin que Vlahovic encuentre un acomodo alternativo, más aumentan las esperanzas de los rossoneri. Para Max, sin embargo, el mejor ataque es la defensa y ahí es donde llegarán los próximos golpes.

SUENAN LOS PERFILES DE JACKSON Y MATETA
El Milan sigue trabajando en el frente calciomercato, con la directiva meneghina dispuesta a intensificar las operaciones en la búsqueda de un delantero que flanquee a Santiago Giménez en las jerarquías de Max Allegri, que se presentó en rueda de prensa el lunes 7 de julio, respondiendo a las preguntas de los periodistas presentes. El perfil solicitado por el entrenador livornés es el de un delantero centro del estilo de Giroud, que pueda desafiar al número siete mexicano, llegado al club rossonero en el mercado invernal de fichajes.
Además del nombre de Dusan Vlahovic, que sigue siendo una pista complicada por el alto salario que percibe el serbio en la Juventus, el conocido experto en fútbol Matteo Moretto revela que durante las conversaciones por Archie Brown -lateral izquierdo del Gent que gusta a la directiva del club de vía Aldo Rossi- también sonó el nombre de Nicolas Jackson, delantero centro propiedad del Chelsea que podría abandonar Inglaterra a cambio de una oferta convincente para los Blues.
El delantero centro senegalés había sido sondeado por el Juventus en los últimos días, aunque la operación se complica debido al coste de la ficha del jugador, que ronda los 40 millones de euros. Los rossoneri, no obstante, siguen tratando de entender la viabilidad del acuerdo. El nombre de Jackson no es, sin embargo, el único que se ha mencionado.
Otro perfil que se suma a la lista de deseos del Milan es el de Jean-Philippe Mateta, delantero del Crystal Palace de 1997 que reúne todas las características del nueve tipo Giroud que busca el Diavolo. Francés del Sevran, el contrato de este jugador de 28 años expira en 2026 y, por este motivo, los rossoneri podrían cerrar la operación a precio de ganga.
También está en la lista de Tare la candidatura de Victor Boniface, delantero del Bayer Leverkusen nacido en 2000 y que milita en el Bayer Leverkusen desde el verano de 2023. Darwin Núñez, por su parte, es el gran sueño, pero tiene un coste muy elevado (etiqueta superior a los 50 millones de euros).