Author: Smoje

Resumen de la 6ª Jornada

Y llegó en esta jornada las primeras derrotas del Lecce y sobre todo del Inter, para la alegría de Milan, Juventus y Nápoles, donde sorprende bastante la mala temporada de la Roma, que cayó goleado ante el Genoa, un equipo que viendo las plantillas, hay bastante diferencia técnica.

JUVENTUS 1 – 0 LECCE

CAGLIARI 1 – 3 MILAN

EMPOLI 1 – 0 SALERNITANA

VERONA 0 – 1 ATALANTA

INTER 1 – 2 SASSUOLO

LAZIO 2 – 0 TORINO

NÁPOLES 4 – 1 UDINESE

FROSINONE 1 – 1 FIORENTINA

MONZA 0 – 0 BOLONIA

GENOA 4 – 1 ROMA

MÁXIMOS GOLEADORES

MÁXIMOS ASISTENTES

EQUIPO DE LA SEMANA

TOP 5 GOLES DE LA JORNADA


Milan – Lazio: Rueda de prensa

STEFANO PIOLI

¿Ayudó jugar partidos contra grandes equipos en verano?

“Sí, nos enseñaron mucho. Para jugar ciertos partidos hay que mantener la atención alta. Mañana nos enfrentamos a un gran equipo”.

¿Llegan a mañana de la mejor manera?

“Estamos bien, queremos encontrar la continuidad adecuada para hacerlo bien en la liga y en la Liga de Campeones. Sólo tenemos que concentrarnos en mañana. Siempre hemos vivido con equilibrio los momentos negativos y los positivos. El derby no fue el final de nuestro camino, sino un nuevo comienzo desde el que volver a empezar. Ahora no somos perfectos, no somos impecables, pero mañana podemos ofrecer nuestro mejor rendimiento”.

¿Cuánto te cabrea Leao con algunas actitudes?

“Si uno falla un pase, no quiere decir que se haya tomado mal un partido. Obviamente alguien como Rafa tiene que cometer los menos errores posibles”.

¿La profundidad de la plantilla es una cualidad?

“Espero que lo sea. Estamos sólo al principio, todavía habrá muchos partidos y dificultades que superar. Estoy convencido de la calidad de mis jugadores, pero tenemos que seguir así”. Tras el parón ha empezado una nueva temporada, para estar arriba hay que ser fuerte en todo. Ahora sólo pensamos en mañana”.

¿Hay algún porcentaje en el que se encuentre ahora su Milan?

“En mi opinión hay varias situaciones de juego en las que estamos a un buen nivel, otras en las que aún podemos crecer mucho. Pero es normal: hemos tenido muchos cambios. Pero he insistido a los jugadores: sólo cuenta el partido de mañana. Jugar tanto ayuda de forma positiva a desechar el partido anterior y a pensar inmediatamente en el siguiente”.

¿Recuperar la cima es emocionante?

“La cima ahora no cuenta para nada, sólo cuentan las ganas de hacerlo bien. No hay partidos fáciles, pero tampoco imposibles. Estoy contento con lo que he visto en estos dos días”.

¿Dónde escondiste a Adli? ¿Cuándo se le ocurrió la idea de ponerlo por delante de la defensa?

“Tenía mucha paciencia y también mucha fuerza mental, ya que jugaba poco. Como central buscábamos jugadores con características diferentes, así que le dije que el puesto de central por delante de la defensa seguía siendo para Krunic”.

“Necesitaba tiempo para entender una nueva posición y nuevas construcciones tanto en la fase de posesión como en la de no posesión: en el tres cuartos se juega de una manera, como central de otra. Sabemos que todavía no puede ser perfecto en esa posición, pero con su disponibilidad puede hacer un gran trabajo. El hecho de que esté convencido de que puede encontrar espacios es fantástico para alguien que juega a este nivel”.

¿Hará también cambios en la defensa?

“La lesión de Kalulu no era deseada. Tengo tres centrales porque Pellegrino todavía necesita algo de tiempo. Evaluaré partido a partido entre los tres centrales que tengo”.

¿Es Tomori indispensable para el Milan?

“Espero que el Milan no sea indispensable para nadie. No queremos convertirnos en esclavos de nadie. El club ha sabido conseguir muchos jugadores fuertes y nuestros principios no cambian en función de quién juegue.”

¿Hay que mejorar en la gestión de los partidos?

“Queremos controlar el partido, pero eso no significa bajar el ritmo. En Cagliari tuvimos un error grave, encajar un gol en un saque de banda. Está bien gestionarlo, pero debemos seguir siendo peligrosos”.

¿Dónde puede jugar Musah?

“Musah puede jugar en las tres posiciones. Tiene características diferentes a las de Krunic y Adli, mientras que tiene calidad cuando juega más adelantado. Tiene características que nos vendrán bien, es un jugador completo y donde quiera que lo utilice será importante para el equipo.”

¿Qué Lazio vendrá mañana a San Siro?

“El Lazio lleva años jugando junto a un excelente entrenador y tiene líneas de juego reconocibles, con gran velocidad y mucha calidad. Más allá de su momento, es un equipo fuerte”.

¿Cómo ve a Chukwueze?

“Sabe lo que tiene que hacer y lo hizo en el Cagliari. De alguien como él también esperamos goles, pero está creciendo”.

¿Demasiadas críticas tras el derby?

“Cuando salió el calendario no miré demasiado hacia delante. Pensé en preparar cada partido. Es inútil hablar de críticas: somos el Milan, queremos ganar y ser competitivos. El club está en un camino maravilloso, ya es capaz de ganar y poner las cuentas en orden. Todo el mundo está trabajando muy bien. Somos el Milan, los elogios son muchos y las críticas también. Forma parte de nuestro trabajo”.

¿Puede jugar Reijnders por delante de la defensa?

“Sí, también puede, pero creo que su posición y la de Loftus nos aportan mucho en estos momentos. Me gusta mucho Tijjani cuando se mueve por el campo: fijarle en una posición más constructiva en mi opinión significaría limitarle.”

¿Cuándo volverá Bennacer?

“Bennacer volverá a mediados de octubre para hacer un trabajo un poco más específico, pero no hay un calendario concreto. El plazo todavía es bastante largo”.


Adli: el regista que no te esperabas

Yacine Adli es un estilo de vida: deténgase a pensar, no acelere el pulso. Al contrario, Yacine Adli es un estilo: elegante, técnico, estético. Fútbol de finales del siglo XX, injertado en esta era del gegenpressing. Estas son sus 72 horas, el cuarto de hora de Warhol dilatado entre el Cagliari-Milán y el Milán-Lazio: todo el mundo habla de él, todo el mundo le piropea, el carro en el que se subían sus aficionados se ha convertido en un gran vagón, luego en un Boeing 747. Todos arriba.

Los que quieran aplaudirle, que vayan reservando sitio en la facturación, pero que sepan que es imposible ir más allá de Paulo Sousa, que le entrenó en el Burdeos, le adora y en directo hizo la comparación épica: “Es un tipo maravilloso, un trabajador. Técnicamente extraordinario, un creativo. En Burdeos lo describí como el nuevo Zinedine Zidane por su creatividad y su calidad técnica. Sin embargo, necesita mejorar algunos aspectos”. La doble Z para un francés es el colmo: como en el abecedario, no se puede ir más allá.

En cambio, Stefano Pioli, del Lazio y del Borussia, va más allá. Adli también jugará como titular el sábado por la tarde contra el Lazio. En Dortmund, sin embargo, por delante de la defensa podría ser el turno de Yunus Musah, probado como medio centro en el Cagliari. Demasiado pronto para hablar de eso, mejor ceñirse a Adli y sus (escasos) 60 minutos en Cagliari. Yacine jugó el miércoles entre Loftus-Cheek y Reijnders, completando 71 de 73 pases.

Es más, se tomó licencias poéticas: un par de lanzamientos no triviales, más de uno vertical hacia la tres cuartos. Jugó suelto, miró al frente, se tomó su tiempo y no tuvo miedo de enfriar el ritmo del partido. Adli es muy diferente de Krunic, del que formalmente es suplente: con él, el medio centro adquiere la función clásica de mediapunta, mantiene el balón entre los pies, intenta construir y quizá defensivamente se distrae. El gol de Luvumbo de hace dos noches fue el resultado de un pasillo vacío por su parte. Aquí tendrá que trabajar para tener cada vez más minutos, encontrar algún espacio cuando vuelva Rade Krunic.

El recital se antoja bueno para octubre. Ayer, sin embargo, Yacine vivió un día especial, con halagos llegados de Milán, de Cagliari, de Francia. Rafa Leao le citó escribiendo ‘la classss’. Falta la E final, pero aún se nota. Antoine Makoumbou, que creció en París como él, su rival del miércoles, colgó su foto juntos con las camisetas invertidas.

Ismael Bennacer le dedicó una historia en Instagram y se nota, aunque lesionado sigue siendo su mejor amigo en el vestuario. Desde aquí se notan muchas cosas. Adli en el campo puede gustar y no gustar, se puede discutir obviamente, fuera de él menos. En los últimos meses, Yacine se ha mantenido positivo, ha animado a sus compañeros y ahora disfruta de su repentina fama de pianista del momento. En el próximo concierto, mañana, habrá más de 70.000 personas.

LAS DIFERENCIAS CON EL INTER

A Stefano Pioli le encanta inventar y no tiene miedo al cambio. Tiene una concepción leonardesca de la profesión. Ha inventado más de un Milan desde que llegó. Enfrentado a una crisis en enero, dio la vuelta al equipo, con la defensa de 3 hombres. Si ha vuelto a lo más alto tras el traumático 5-1 en el derbi, es porque ha sabido hacer los ajustes adecuados en la tienda: más peso en el centro del campo y más prudencia táctica.

El miércoles en Cagliari gritó dos veces el eureka del inventor el miércoles en Cagliari, por la buena actuación del casi olvidado Adli en la dirección y por el córner estudiado en el laboratorio que envió Tomori a la portería. Con los principios de juego y equilibrio intactos (5 de construcción, 5 de ataque), Pioli cambió las funciones sobre el terreno de juego. Ganó un scudetto subiendo a Tonali y Bennacer a su vez y centralizando a los laterales. Comparado con Inzaghi, es más desorientador y reactivo ante los imprevistos.

Con la entrada de Romero, en la final del Cagliari-Milán, Pioli, en la sexta jornada, hizo entrar a todos sus jugadores de movimiento. Es una filosofía precisa: estirar al máximo el equipo, implicar a todos. La rica rotación en el Cagliari no fue trivial e implicó una dosis de valentía.

Pioli lanzó inmediatamente a los nuevos fichajes, como había hecho el año pasado con De Ketelaere, antes de rendirse a la evidencia. Una implicación democrática que le vincula aún más al vestuario. La sensación es que Pioli tiene más talento empático que Inzaghi. A lo largo de los años, ha sacado lo mejor de Calhanoglu, ha destetado a Tonali y ha criado a Leao y a muchos jóvenes.

Pioli se ha ganado la estima del grupo gracias al conocimiento con el que levantó al Milan a su llegada. El vestuario es una manada que sólo te olfatea y te sigue si confía en ti. Al primer olfateo, incluso Ibra, un tipo que no reconoce tan fácilmente el liderazgo, se puso inmediatamente del lado de Pioli.

El Scudetto, que dio un nuevo estatus al técnico rossonero, le hizo aún más fuerte a los ojos del equipo y de la propiedad, que le confirmaron tras la defenestración de Maldini. Por constitución de carácter, aunque vive apasionadamente el juego al límite del área técnica, nunca tendrá una furia Conti. En el reciente derbi de pesadilla, por ejemplo, no supo interceptar el desplome del Diavolo y evitar que cayera al barranco. Pero luego lo levantó, con sus conocimientos, y lo devolvió a lo más alto de la tabla.

La luna de miel de Stefano Pioli por el Scudetto 2021/22 duró mucho, al son de ‘Pioli is on fire’. Un verano de cuento de hadas pasado bajo el asedio de aficionados agradecidos y entusiastas. En Sicilia hicieron falta los carabinieri para liberarle del abrazo de los milaneses… El doloroso último campeonato y, sobre todo, el humillante derby del 5-1 enfriaron la relación. Durante el Milan-Newcastle de la Liga de Campeones, al anunciarse las alineaciones, San Siro mezcló abucheos y aplausos.

Pero, en general, la relación Pioli-tifosi sigue siendo sólida, especialmente con la curva, con la que ha tenido más de un enfrentamiento. ¿Recuerdan las escuchas al equipo en La Spezia? También es sólida la relación con los propietarios que, aparte del Scudetto, reconocen su competencia y seriedad en el trabajo. Los tiempos de Rangnick y la revolución rota han quedado atrás. Ya no tiene el paraguas protector de Paolo Maldini, precioso en los días de tormenta, pero, en general, el ambiente que rodea a Pioli transmite positividad.


Primer paso formal para San Donato

A la espera de que se concrete -y aquí con las previsiones estamos en torno a octubre de 2025-, el AC Milan pone la primera gran piedra de su nuevo estadio en términos burocráticos. Tras meses de reuniones técnicas y estudios de viabilidad, el club rossonero ha presentado al ayuntamiento de San Donato Milanese la propuesta de variante urbanística necesaria para seguir adelante con el proyecto en la zona de San Francesco. Un acto formal que en la práctica pone sobre el papel las intenciones del club y pasa la pelota entre los pies del municipio del primer cinturón milanés.

Un acto posibilitado -también- por la adquisición el pasado mes de junio de SportLifeCity, la sociedad propietaria de los terrenos. En este sentido, la parte esencial de esta primera fase es una en particular: SportLifeCity ya había obtenido las autorizaciones para destinar la zona de San Francesco a la construcción de un área deportiva con aproximadamente 20.000 plazas.

Así pues, el uso previsto no cambia, ni tampoco la superficie edificable afectada. Cemento, en términos sencillos: 108 mil metros cuadrados (tales eran y tales siguen siendo) situados entre el inicio de la circunvalación este de Milán y el cruce que permite entrar en la ciudad a quienes llegan desde la autopista A1. Por otro lado, la superficie total de la intervención crecería: de 300.000 a 460.000 metros cuadrados, “desbordándose” en algunas zonas -mirando el mapa desde arriba- a la izquierda del nudo de la autopista. Pero se trataría de intervenciones medioambientalmente sostenibles.

Es lo que el Milan denomina la “nueva puerta de Milán”, bajo la fuerte bandera de la sostenibilidad (se prevén varias mejoras en el uso de las zonas verdes del Parque Sur, con una vegetación utilizable que pasaría de los 80.000 metros cuadrados de la propuesta anterior a unos 235.000) y también de la visibilidad, ya que el futuro estadio rossonero sería la primera gran estructura que encontrarían quienes llegaran a la ciudad desde el sur.

Desde Via Aldo Rossi quieren aclarar que esto es sólo el principio del proceso, pero al mismo tiempo subrayan el “intenso trabajo con consultores y las importantes cantidades de dinero implicadas, para una evaluación en profundidad”. Son palabras del presidente Paolo Scaroni, que hizo balance de la situación flanqueado por Tim Romani, ex presidente de Caa Icon y jefe de este proyecto, y su estrecho colaborador Nicholas Gancikoff. Observaciones preliminares: aún no se ha llegado a hablar del aspecto exterior de la instalación (en el renderizado, la forma del estadio es “neutra”), ni del posible naming, pero sí se han aclarado varias características del proyecto, supervisado por Studio Manica.

Y así: un estadio de 70.000 localidades, con gradas más profundas y asientos más generosos, apto también para eventos, conciertos y otros deportes (fútbol americano, rugby). Cerca de la instalación, la nueva Casa Milan, la tienda y el museo, un hotel y un centro de ocio, siguiendo las directrices de Gerry Cardinale, que ya ha trabajado con Romani en otras instalaciones en Estados Unidos. En cuanto al sistema viario, se han previsto nuevos cruces tanto en dirección norte como sur, pasarelas peatonales para conectar San Donato con el Parque Sur y la ampliación de la línea ferroviaria, con la estación situada junto a la zona de San Francesco.

¿Los próximos pasos? En los próximos dos meses, el Ayuntamiento de San Donato examinará en detalle la propuesta y luego la presentará a la Región, que intervendrá en la variante urbanística y proseguirá el diálogo con Milán. El calendario imaginado por el club: proyecto aprobado a más tardar en la primavera de 2025, inicio de las obras en octubre del mismo año, Milan sobre el terreno de juego en la nueva instalación a partir de la temporada 2028/29.

Los puntos fuertes imaginados por el club también se referirían a las derivaciones sobre el territorio, con la conexión este-oeste desde San Donato hacia la Abadía de Chiaravalle, la usabilidad y los servicios para el Parco Sud (por cierto, el diálogo con la autoridad aún no ha comenzado, pero su consejo de administración ha votado una moción expresando una opinión negativa sobre cualquier solicitud de construcción de instalaciones).

Milán también hace hincapié en lo que no se incluye en el proyecto: ninguna construcción “sobre el suelo” en el Parco Sud, ningún centro comercial, ningún flujo de coches o aparcamiento en la zona de Chiaravalle o en la ciudad de San Donato. Llevamos un año trabajando intensamente en esta zona”, explica Scaroni, “y parece una variante fácil”.

¿Es San Siro un capítulo completamente cerrado? No está muerto, pero está más lejos. Digamos que si Sala consiguiera eliminar la limitación, reviviría…’. Tim Romani se muestra confiado: “Para mí será el último proyecto, estoy aquí porque lo haremos. El proyecto se completará”.

SIETE GOLEADORES EN SEIS PARTIDOS

Transfermarkt.es ha elaborado la clasificación de los equipos con más goleadores distintos en este inicio liguero. El Milan contra el Cagliari llegó a 7, sumando Okafor, Loftus-Cheek y Tomori a Pulisic, Leao, Theo y Giroud.

A 7 también Inter, Nápoles y Fiorentina. En el 8 está el Atalanta de Charles De Ketelaere, al que se une la Roma (también gracias a los 7 goles marcados al Empoli). En Europa domina el Girona con 11 goleadores diferentes, segundo es el Newcastle de Sandro Tonali con 10.


Milan: grito doble

STEFANO PIOLI

Sobre el partido

“No fue sencillo, nos cerraron bien y se aprovecharon de una ingenuidad nuestra. Supimos mantener la lucidez, ganamos un partido difícil que nos da continuidad”.

Sobre los nuevos jugadores

“No hay jugadores nuevos y viejos, llevamos tres meses trabajando juntos. Estoy seguro de que en lo inmediato se puede pagar algo, pero a largo plazo se gana algo. Lo importante es tener jugadores fuertes que estén disponibles y que mantengan el nivel alto”.

Sobre los cambios

“Tuve que leer el partido, en la segunda parte el Cagliari había puesto a Luvumbo en la línea de tres cuartos y tenía un ritmo diferente. Adli y Musah lo hicieron bien, Reijnders es fuerte pero también tendrá que descansar”.

Sobre Calabria

“No pudo jugar desde el principio, está mejor pero esperaba darle minutos. Hemos ganado este partido con nuestro fútbol”.

¿Una plantilla más larga?

“Empecé con este objetivo y el club ha sabido complacerme. No tengo muchos jugadores y lo prefiero, pero tengo unos cuantos que están listos para jugar. Quizá pueda pagar algo a corto plazo, pero a largo plazo nos beneficiaremos con jugadores más motivados y menos lesiones. No es que vaya a hacer los cambios sólo por los muchos partidos, sino también para mantener alto el nivel del equipo”.

¿Cómo valora a Loftus-Cheek?

“Rubén es un jugador fuerte, muy completo, que nos da todo: balón, inserción, físico, balones sueltos. Es muy importante, pero hay que gestionarlo porque no ha jugado mucho en los últimos años”.

¿Cómo valora a Adli?

“Lo ha hecho bien. Estoy muy contento por él. Ha desempeñado este papel desde el 10 de julio con mucha voluntad y ganas de mejorar: siempre revisa las actuaciones de sus compañeros en ese papel. Hizo muchas cosas bien, otras las puede hacer mejor, pero es una actuación que me da la posibilidad de considerar a Adli en ese papel.”

El Milan tiene un gran potencial…

“Hemos jugado un partido que no era fácil tácticamente. Teníamos que ser equilibrados para ser peligrosos, pero aparecieron algunas fisuras. Controlamos el partido. Okafor hizo un partido muy bueno: puede jugar de delantero o de exterior en lugar de Leao. Tengo muchos jugadores flexibles, quizá sólo Chukwueze pueda jugar sólo por la derecha. Jovic, que me dio buenas sensaciones con el Verona, también se está recuperando bien”.

¿Cómo arreglar la defensa?

“En la primera parte no arriesgamos nada, salvo en el saque de banda del gol, en el que tuvimos que estar más atentos. En la segunda parte fallamos demasiados pases y concedimos un poco, pero no es tan fácil ir por delante durante 95 minutos. Luego está claro que teníamos que hacerlo mejor”.

¿Cómo es Reijnders?

“Es un gran jugador, me gustaría que encajara un poco más entre líneas. Tiene una inteligencia y una limpieza técnica….. Hoy los ha probado. Musah también puede jugar como medio centro y eso me hace sentir cómodo sustituyendo a Krunic”.

¿Cómo de bueno será el nuevo estadio para los aficionados?

“Creo que el futuro de un gran club pasa por la pasión por San Siro, pero pasa por la innovación y por un estadio en propiedad. El fútbol italiano estamos atrasados. El nuevo estadio hará que el club sea aún más glorioso y competitivo”.

YACINE ADLI

“He esperado y soñado con esta noche, pero ha hecho falta trabajo y paciencia. La he tenido y lo he dado todo por este momento. Pero es sólo un partido y quiero hacer más. Quiero demostrar que estoy ahí y que puedo ayudar”.

¿Cómo te desenvuelves como medio centro?

“He jugado un poco en todas partes: la posición me va bien. Cuando Pioli me dijo que jugara por delante de la defensa, le dije: ‘Déjame jugar donde tú quieras'”.

¿Cómo fue no jugar?

“Fue difícil, por supuesto, porque quería jugar como todos los futbolistas, así que busqué la felicidad de otras maneras. Siempre intenté ayudar. El primer día hablé con Pioli y me dijo que íbamos a cambiar la forma de jugar y que yo no estaba cubierto. Entonces Tomori me preguntó qué iba a hacer y le dije: ‘Me quedo aquí y ya me verás jugar'”.

Entrevistado por MilanTv, Yacine Adli comentó lo siguiente sobre el partido contra el Cagliari

“Bueno, ha sido un partido que hemos planteado bien. Sabíamos que era difícil, aquí sabemos que arriesgamos con sus reanudaciones. Empezamos bien, ellos marcaron pero nosotros seguimos jugando y marcamos dos goles después del suyo”.

Sobre el juego

“Es sólo fútbol, pero estaba concentrado. Intenté divertirme, jugar bien y estoy contento”.

Sobre el rendimiento

“Siempre intenté trabajar bien, el entrenador siempre me ayudó y me dio muchos consejos. Es sólo el principio”.

Sobre el futuro

“Quería demostrar que estoy ahí y que puedo ser una solución, luego el entrenador tomará sus decisiones y yo estaré disponible”.

LOFTUS-CHEEK

La noche perfecta, su primer gol y los tres puntos

“Estoy muy contento con la victoria. Fue un partido difícil, nos marcaron, pero nos mantuvimos fuertes mentalmente y conseguimos remontar. 3 puntos importantes, muy contento por el primer gol, espero que el primero de muchos”.

El partido

“Antes del partido hablamos de la importancia de desbloquear la ventaja, pero en lugar de eso ellos se adelantaron. Por eso estoy orgulloso de este equipo, hemos permanecido unidos y hemos remontado”.

Una gran reacción

“Queremos luchar por el Scudetto y estos son partidos que tienes que ganar si quieres competir por el campeonato. Si caes tienes que demostrar que tienes la capacidad de darle la vuelta y lo hicimos bien”.

PUNTUACIONES Y VÍDEO RESUMEN


Cagliari 1 – 3 Milan

El Milan envía un mensaje en una botella desde Cagliari: ‘Dile al Inter que para el Scudetto también estoy yo’. Subtítulo, escrito en letra pequeña pero no demasiado: ‘Pioli tiene un equipo de verdad, más completo que hace un año’. El Milan facturó mucho y ganó 3-1 en el Unipol Domus: ventaja de Luvumbo, luego Okafor, Tomori y en la segunda parte Loftus-Cheek.

No habrá pasado desapercibido que los dos goles fueron inéditos: Okafor y Loftus-Cheek nunca habían marcado en Italia (Okafor no marcaba desde noviembre…) y esto, para un Milan vinculado a Giroud y Leao, es fundamental. Sobre todo, Pioli obtuvo respuestas de muchos recién llegados: Adli, Chukwueze, Musah, Sportiello.

No fue un Milan por encima de toda sospecha -con 1-0 temblaron-, pero gustó por personalidad, decisión y calidad individual: Pulisic entrando en dos de los tres goles, Reijnders entre los mejores, Tomori aún muy positivo, un golazo de Loftus-Cheek. Y decir que el Cagliari se había puesto por delante…

Veamos los goles. En el minuto 29 Luvumbo ganó un choque con Adli, que no reaccionó y la perdió. Nandez lo encuentra bien y Luvumbo chuta fuerte, pero muy fuerte. Sportiello levanta las manos como diciendo “me rindo”. El Milan empata en el minuto 40 y tiene que agradecérselo a Radunovic. Pulisic se zafó de Zappa y centró raso, un balón inofensivo que el portero del Cagliari, con una parada en plancha, convirtió en asistencia para Okafor, apagado y decepcionante hasta ese momento.

Un empate que lanzó la jugada de la remontada, que llegó en el tiempo añadido de la primera parte. Un saque de esquina de Adli, una jugada que liberó a Reijnders, un fuerte centro del holandés. En ese momento, fue una cuestión de reactividad y suerte: Tomori estuvo decidido, quemó a Hatzidiakos y metió el gol. Quedaba el 3-1, nacido de un contragolpe milanista en el que Pulisic controló y liberó en la frontal del área a Loftus-Cheek, que estuvo bien chutando fuerte desde fuera del área, en el último centímetro junto al poste.

Pioli empezó con Chukwueze-Okafor-Pulisic en punta y confió en Adli para jugar. Todo era de esperar, incluso el guión: el Cagliari replegado atrás, listo para la reanudación, el Milan con el balón. Sí, pero ¿partido entretenido o aburrido? Entretenido, con ocasiones. Primero un disparo de Reijnders, luego Florenzi, en el minuto 9 ya la tercera ocasión para el Milan, un balón de Reijnders para Okafor. Y de nuevo, dos ocasiones para Loftus-Cheek antes de que empezaran a llover goles: Luvumbo en el minuto 29, Okafor en el minuto 40, Tomori en el minuto 46.

El Milan vivió su momento más difícil cuando se vio por debajo en el marcador: justo antes del gol del empate, se tambaleó y tembló ante un disparo de Sulemana al segundo palo, tras una pérdida de Theo. El error de Radunovic, sin embargo, cambió el partido, y relativamente importa que el guardameta del Cagliari obrara un milagro en la última acción de la primera parte: una volea al larguero a disparo de Hernández.

La segunda parte fue otra historia, en parte porque el Cagliari pasó al 4-4-2 (Oristanio en lugar de Wieteska), y en parte porque Loftus-Cheek hizo el 3-1 a los 14 minutos, poniendo el partido en bandeja a Pioli. A partir de ahí, cambios, regates del Milan, un disparo de Oristanio repelido. Poco más.

Al final, equilibrio. El nuevo Milan, con rotación necesaria, convenció. Sin Leao ni Giroud, nació una democracia en la que todos por turnos -Reijnders, Adli, Loftus-Cheek, Chukwueze, Pulisic- pueden intentar la jugada. Y la intentan. Adli fue… todo Adli en una tarde. En el gol del Cagliari mostró los límites de su aptitud defensiva, pero durante 58 minutos lideró al Milan con ideas y personalidad, facilitado por el hecho de que el Cagliari se hundió y le dejó jugar.

Para bien o para mal, es el jugador más alejado posible de Krunic (pero eso ya se sabía). Luego, por supuesto, las variaciones. Pioli en el 2-1, cuando el Cagliari empujaba, jugó con Pobega y Musah para dar físico e intensidad… y Loftus-Cheek le dio rápidamente la razón. Leao entró en los últimos 20 minutos e hizo poco. En resumen, casi todo bien, incluido el descanso total de Giroud, que se quedó en el banquillo hasta el final. De cara a Lazio y Borussia, le vendrá bien.

Ranieri, por su parte, sorprendió con un Cagliari peculiar, un 4-5-1 en el que Luvumbo empezó en la derecha para convertirse en segundo delantero, mientras que Nández jugó en la izquierda, no en la derecha como es habitual. Extraño. Funcionó a ratos, porque Luvumbo fue a menudo un incordio, pero el Diablo, como suele decirse, se coló en los detalles: el error de Radunovic, el 2-1 de penalti, un contragolpe raro concedido a Pulisic.

Preocupantemente, el equipo decayó en la segunda parte y sólo inquietó a Sportiello a tres minutos del final con un disparo de Oristanio. El veredicto es simple pero claro: en ataque, aparte de Luvumbo -el único que chuta, el único que marca-, todo es oscuridad.


6ª Jornada: Cagliari – Milan

AS Roma vs AC Milan

Tras el éxito contra el Verona y reforzado por la segunda plaza liguera, el Milan de Stefano Pioli se dispone a afrontar la próxima jornada de la Serie A entre semana con el objetivo de mantener el ritmo en la máxima categoría. El Diavolo se enfrentará a un Cagliari en apuros, actualmente penúltimo y hambriento de puntos, pues sólo ha sumado dos en sus cinco primeros partidos. Los sardos intentarán aprovechar el empuje de la Unipol Domus, para tratar de encontrar el gol, que entre los muros locales en este campeonato aún no ha llegado.

En general, la falta de puntería es la limitación más evidente de los hombres de Claudio Ranieri en este inicio de temporada: después de cinco partidos, Zito Luvumbo ha marcado el único gol contra el Bolonia. En la historia del Cagliari en la Serie A, sólo en la temporada 2008/09 (con Massimiliano Allegri en el banquillo) el club se había encontrado con tantos o menos goles en su haber al término de sus cinco primeros partidos en la competición (uno); en aquel caso, en la sexta, los sardos empataron a cero contra el Milan.

LOS DATOS DEL CAGLIARI

Claudio Ranieri deberá sin duda intentar aprovechar al máximo el potencial técnico de que dispone para tratar de hacer daño al Milan. La dificultad ofensiva del Cagliari se explica también por el número de tiros a puerta: sólo seis, al menos cinco menos que cualquier otro equipo del actual campeonato. El porcentaje medio de posesión del balón es del 37,9%, el segundo más bajo del actual torneo tras el 34,8% del Génova.

Cuando manejan el balón, los rossoblù tienen el tercer peor porcentaje de acierto en el pase: 76,1%, sólo por delante del Génova (74,2%) y el Verona (75,6%). Desde el inicio de la temporada se han registrado 18 secuencias de 10 o más pases, la segunda peor cifra tras las 17 del Verona, y sobre todo la media más baja de pases realizados por secuencia en la actual Serie A: sólo 2,55.

Gran parte de la peligrosidad ofensiva del Cagliari gira en torno a la viveza de Zito Luvumbo, autor del único gol de los sardos en esta Serie A y a un paso de alcanzar los 50 partidos con los rossoblù en todas las competiciones.

El angoleño es un jugador rapidísimo y peligroso, sobre todo cuando se abren espacios verticales, y que nunca desdeña las jugadas de riesgo: así lo demuestran los 20 regates intentados, ¼ del total del equipo (20/80) y la sexta cifra más alta del actual campeonato. Primero entre los jugadores del Cagliari también por el número de faltas recibidas (10), a veces su exuberancia le lleva a alejarse demasiado del contexto táctico, como demuestran los seis fueras de juego registrados en lo que va de campeonato, menos sólo que Victor Osimhen (ocho).

Sin embargo, el jugador del Cagliari que sin duda ha mantenido más continuidad en términos de rendimiento es el defensa Alberto Dossena, pivote central de la defensa de tres hombres que ahora dirige Claudio Ranieri. Primero entre los jugadores en movimiento en cuanto al número de balones recuperados (42), por delante de Bryan Cristante (40) y de su compañero Antoine Makoumbou (39), Dossena se ha mostrado hasta ahora especialmente eficaz a la hora de defender su propia área de competencia y blindar las conclusiones del adversario; prueba de ello son los 29 rechaces defensivos, la segunda mejor cifra del actual torneo por detrás de los 31 de Radu Drăgușin.

POSIBLES ALINEACIONES

RETRANSMISIÓN DEL PARTIDO

España: Movistar Liga de Campeones (18:30 PM)

Latinoamérica: Star+, ESPN

Estados Unidos: Paramount+

RETRANSMISIÓN POR INTERNET:


Adli será titular mañana

Yacine Adli vuelve a ver las estrellas casi un año después. Él, el Godot del Milan, siempre a la espera de encontrar ese espacio que en los últimos 300 y más días nunca se le ha concedido. Esta vez sí: el francés será titular ante el Cagliari en lugar de Krunic.

La oportunidad de su vida. La última vez que jugó de 1′ salió a la hora y luego apenas jugó. Fue el 16 de octubre de 2022, 2-1 del Milan en Verona. Luego 7 minutos en Florencia y 19 en La Spezia en siete meses. Mañana estará al frente, el chico apasionado por el piano enamorado del Milan desde el primer día, incluso sin jugar.

La historia de Adli es una de las más curiosas de los últimos años. En el conjunto rossonero cuenta con seis apariciones, pero la afición le adora y se ha convertido en “uno de ellos”. Es uno de los pocos que siempre se detiene a la salida de Milanello, rodeado de niños a la caza de autógrafos y selfies. De vez en cuando alguien le susurra que se quede, él sonríe y sigue firmando el balón. El año pasado, tras una temporada alejado de los focos, organizó una cena en su casa con todo el equipo, invitando incluso a Pioli.

El manifiesto de cómo Adli, de 23 años, está tan ligado al mundo milanista que no quiere marcharse aunque no juegue. El entrenador le ha mantenido como suplente de Krunic, un papel que no es el suyo. Yacine nació como un fantasioso con licencia para inventar, ocasionalmente en el Burdeos también jugaba por fuera, pero para quedarse en el club rossonero optó por aprender dirección. Con el bosnio fuera por lesión, contra el Cagliari será su turno: 346 días después de su último partido como titular.

Adli tiene una gran oportunidad. De demostrar por fin que puede formar parte de este grupo con la cabeza bien alta. Siempre se le ha criticado su falta de ritmo, un ritmo diferente al de los titulares, una velocidad diferente. Ahora tiene la oportunidad que lleva esperando casi un año. Se habló de una cesión en verano, pero al final se quedó donde está.

Todo ello tras 140 minutos en seis partidos y la exclusión de la lista de la Champions. Esta vez sí, pero hasta ahora sólo había coleccionado banquillos. En los últimos meses le hemos visto abrazarse a sus compañeros y recibir aplausos. El 11 de julio, el día que empezó la concentración, Leao le espetó de inmediato: “Demuestra quién eres”. Era la oportunidad que estaba esperando.


El Milan cree en el scudetto

Los próximos 40 días del Milan parecen sacados de la Biblia: una travesía del desierto. El calendario ha reservado a Pioli un horóscopo complejo: mañana fuera ante el Cagliari, luego el Lazio en casa, Liga de Campeones en Dortmund, fuera de casa en Génova, Milán-Juve, viajes a París y Nápoles. Sería el mes de Libra, pero aquí hay poco equilibrado: tantos obstáculos, medios, altos y muy altos. Entonces, ¿cómo hacerlo?

El Milan de 2023 ha demostrado que tiene una cualidad y Pioli se centrará en ella: la compacidad. En enero, en medio de la peor crisis de los últimos años, el equipo se mantuvo unido y encontró la fuerza para reaccionar, eliminar al Tottenham y al Nápoles, y jugar una semifinal de la Liga de Campeones. No es poca cosa. Pioli tuvo una reflexión reveladora el sábado: “No podemos ir a por todas, y creo que hay demasiada negatividad en torno a mis jugadores. En lo que a mí respecta, asumo toda la responsabilidad, entreno a un grupo muy responsable. El grupo sabe que el error de un compañero es el error de todos”.

El mensaje al mundo es claro, el Milan es un equipo y trata de compactarse, incluso cerrándose en banda contra la polémica y los ataques externos. Pioli se refería entonces a Leao -al que se culpó del desafortunado taconazo contra el Newcastle-, pero el discurso puede extenderse a algunos de sus criticados compañeros y sobre todo a él, que sin duda ha vivido mejores momentos con el Milan. No es ningún misterio que hoy el primero de los criticados sea el entrenador.

En definitiva, el Inter de Pioli quiere compactar el grupo para intentar mantener empatada la clasificación. El Inter tiene entre septiembre y octubre un calendario decididamente más fácil, con un único enfrentamiento directo en la zona Champions: Inter-Roma el 29 de octubre. El pequeño milagro del Milan sería mantenerse a distancia, quizá incluso a rebufo, para intentar alcanzar a sus primos entre noviembre y diciembre.

Temprano, definitivamente temprano para entender cómo le irá en un mundo en el que a cada paso -es decir, a cada empate o derrota- se cuestionan todos los montajes. Más sencillo es entender lo que Pioli intentará hacer en los próximos 40 días, a partir de mañana, desde Cagliari, con un equipo lejos en la clasificación pero más espinoso de lo esperado.

El líder de la caravana, al comienzo de la travesía del desierto, debe establecer reglas y jerarquías claras, contar con la confianza de todos, explicar cuáles serán los peligros de la ruta. Pioli necesita a sus jugadores clave: es el primer paso hacia el desierto. Un hombre clave regresará mañana: Theo Hernández ya se entrena con el equipo.

El otro llegará probablemente el fin de semana: Mike Maignan ya está bien, pero la idea del Milan hoy es gestionarlo, no arriesgarlo en Cagliari para tenerlo para el Milan-Lazio en buenas condiciones, sin preocupaciones potenciales de lesión. Y aunque Maignan es probablemente el jugador más fuerte del Milan en estos momentos, Theo es fundamental para el juego de Pioli. Con Theo, el Milan puede jugar su ofensivo 4-3-3, sorprender con improvisaciones por la izquierda sin conciencia, y asustar con la banda izquierda más fuerte de Italia.

El segundo paso en el desierto será encontrar energía, rendimiento, goles de los nuevos. Pioli no sacó casi nada de Okafor y Jovic, apenas algo más de Chukwueze. Loftus-Cheek estuvo bien, Reijnders y Pulisic fueron excelentes antes del bajón post-derbi, Musah está creciendo, pero este es el momento de la alternancia, aquí las segundas líneas deben convertirse en protagonistas como nunca ocurrió en el último campeonato. Jovic aún no está en condiciones -de él volveremos a hablar-, pero Okafor y Chukwueze serán importantes desde el principio.

El tercer paso es el más complejo: garantizar la resistencia defensiva. El Milan no encajó ningún gol en los dos partidos posteriores al derbi con el Newcastle y el Verona, pero es un equipo constitutivamente ofensivo, con Loftus-Cheek y Reijnders mucho mejores mirando hacia delante que hacia atrás. Sin Krunic, un equilibrador profesional, Pioli tendrá que estudiar algo, quizá no contra el Cagliari, que se acercará, pero sí en los siguientes partidos. Proteger a Thiaw y Tomori es prioritario: nunca se han visto equipos que lleven tantos goles en la lucha por el Scudetto.

Y así, paso a paso, Pioli puede empujarse al desierto y superar estos 40 días junto a su equipo, que él ayudó a construir y siente suyo, presente, no siempre brillante pero unido. Si aguanta, podrá mirar hacia arriba y ver la segunda estrella, que hoy parece muy lejana. A finales de octubre, quién sabe.

OKAFOR SERÍA TITULAR MAÑANA

El suplente de Giroud se hará cargo del área mañana en Cagliari, y hay bastantes probabilidades de que no sea el suplente “natural” del francés: suben las cotizaciones de Noah Okafor, uno que prefiere esprintar por la izquierda pero que puede vestirse de delantero centro si es necesario. Así lo probó Pioli durante toda la pretemporada,

Y en esa posición el suizo, llegado del Salzburgo por 14 millones, podría debutar como titular. Es sobre todo una cuestión de condiciones: Jovic, sobre el papel la alternativa real a Giroud, todavía no está en su mejor momento. El ataque del Milan en Cagliari cambiará de cara, pero no es seguro que la revolución implique a todo el tridente: Rafa Leao, siempre titular hasta ahora como Giroud entre campeonato y Champions y que ha marcado desde tres partidos seguidos en el A, podría partir de inicio también contra los rojiazules, con uno entre Chukwueze y Pulisic para completar el trío ofensivo.

La primera opción garantizaría explosividad y rapidez, la segunda daría más equilibrio: Pioli disolverá las últimas dudas sólo hoy. También está por ver quién ocupará el puesto de Krunic en la dirección del mediocampo (el bosnio, que será reevaluado en diez días, estará de baja al menos un mes por una lesión en el isquiotibial derecho). Por el momento, Reijnders está por delante de Adli, hasta ahora hasta ahora uno de los tres jugadores jugadores de movimiento jamás empleados junto con Romero y Pellegrino.

HOY NO HABRÁ RUEDA DE PRENSA

Al contrario de lo que sucede prácticamente en todas las previas, Stefano Pioli no hablará hoy en rueda de prensa en la víspera del Cagliari-Milan. La razón hay que buscarla en los numerosos compromisos cercanos que tienen actualmente los rossoneri: es justo que Pioli aproveche el escaso tiempo disponible para preparar el partido de mañana fuera de casa.


Recordando a Giovanni Lodetti (1942-2023)

Giovanni Lodetti ya no está. Le llamaban Basléta, era el barbilla de gancho más bello de la historia de Milán. Corrió toda su vida, arriba y abajo por todos los campos del mundo. Por sí mismo, por Rivera, por Milán y su gran pueblo rossonero. Por Paron Rocco, el Sheriff Viani, Italia, la Sampdoria, su hermosa familia y su cerámica.

El viernes se paró, tenía 81 años. Con los rossoneri lo ganó todo de verdad, dos Scudetti, la Coppa Italia, dos Copas de Campeones, la Recopa, la Intercontinental. Giovanni, Giuanin, Giuan es de Caselle Lurani. Es un niño alegre y rápido. Corre. Siempre corre. Hincha del Milan, hizo su primera prueba a los 13 años. Giuanin jugará 9 años en el Milan (y 5 en la Sampdoria). Es centrocampista y corre. Decía: “Pero corrí por mí, por mi mujer, por mi hijo que se graduó, se hizo dutur”.

Es un chico, un hombre decente, educado y considerado. Un recuerdo personal, hace unos diez años. Era un día soleado, en el club ferroviario de Piazza Tirana. Giovanni jugaba al scopa d’assi con sus amigos de Giambellino. Era socio, jugaba al tenis y al fútbol. Corría y ganaba, incluso a la scopa. Todos hablaban en dialecto milanés. Un poco de confusión, las cartas de los perdedores tiradas sobre la mesa.

Giovanni Lodetti se alisó la barbilla saliente, es decir, la Basléta, y se echó a reír. “Hay que saber jugar a las cartas”. Salimos fuera, Lodetti olfateó el aire. “Se está bien aquí, esta es la vida que me gusta. Cosas sencillas, gente sencilla, una raqueta, un par de zapatos y a correr. Acabo de comprar dos onzas de café, me lo han molido en el bar, luego me lo tomaré con la Gaggina…”. Cuatro pasos, el campo de fútbol de la casa club de los ferroviarios.

Giuan metió las manos en la red de la valla. “Mi pasión. Me emociono cuando veo uno”. Subimos al coche: “Ahora vamos a dar una vuelta por mi Milán”. Bande Nere, vía San Gimignano. “Berlusconi vivía aquí. Su padre, el comendador Luigi, no quería que Silvio se hiciera cargo de Milán. Solía decir: ‘Olvídalo, te meterás en problemas’. Y yo le decía a la cumenda: ‘No, no, tiene que tomarlo’. Sciur Luigi, jugué con el Milan de Felicino Riva. Corremos el riesgo de volver a aquellos tiempos”.

Giuan relató: “Nací en Caselle Lurani, en la provincia de Milán. Ahora está bajo Lodi. Vinieron a buscarme en una Lambretta y firmé por el Pejo Lorenteggio. El cura, Don Giovanni Delle Donne, no me quiso y se llevó la tarjeta. Volví a Caselle y perdí un año. Pero yo era bueno. Buenos pies también. Corría mucho, pero era mediapunta. Minga un mediapunta. Hamrin, Lodetti, Sormani, Rivera, Prati. Ese era un ataque del Milan. ¿Quién corría? “Trapattoni y yo. Corrimos de la manera correcta, especialmente para Rivera. No tenía que sudar. Era mejor que descansara: tenía que pensar. El Giani era el mejor, ponía a Altafini y Prati delante de la portería y marcaban goles. Y el Milan ganaba y todos acabábamos en la foto. ¿Entiendes? Y entonces tenía que correr porque era mi trabajo”.

Vive la vida de un atleta, siempre tiene entrenamiento por la tarde y luego se acuesta a medianoche y se levanta a mediodía. Desde hace seis años. “Mi madre María me despertaba a las doce menos cuarto: “Giuanin, l’è prunta la bistècca”. Me sentaba a la mesa con los ojos hinchados, me comía el filete y luego me iba al campo, flaco como un clavo. Una vez Rocco me dijo: ‘Giovanni, estás delgado, seco: dime la verdad, ¿comes en casa?’. Y yo dije: ‘Como, como. No mucho, pero como”.

Su padre era carpintero a las órdenes de un maestro y ganaba cuarenta mil liras al mes. A menudo recuerda: “Cuando cobré mi primer sueldo, fui andando desde la oficina de Via Andegari hasta Porta Romana. Podía haber cogido el tranvía, pero no me fiaba. ¿Y si me quitaban el sobre? Estuve a punto de correr tres kilómetros con la mano en la chaqueta. Dentro había dinero: ciento sesenta mil liras. Llegué a casa y le di el sobre a mi padre. Lo abrió y se echó a llorar”.

El primer derbi de Lodetti. “Rocco da las camisetas a todos, 7 quedan libres. El Paròn le dice a Viani: “Gipo, me he puesto malo, voy a hacer esta mona zogar”. Coge la camiseta, Giovanni, y de repente le da dolor de barriga, pero dolor de barriga…. “Corro al baño. Los demás calientan, Rocco me busca. ‘¿Dónde se ha metido Lodetti?’ Trapattoni le dice: ‘Ha tenido un movimiento’. Me convertí en titular del Milan, campeón de Italia, de Europa, del mundo. En el Milan, luego en la selección”.

Luego lo vendieron a la Samp. “No me lo esperaba. Era 1970, estaba en México, volví a casa para hacer sitio a Boninsegna y Prati”. Se fue al Génova con Luis Suárez, jugó 117 partidos seguidos. “Nunca me he puesto enfermo. Recuerdo al entrenador Heriberto Herrera, fanático e incluso sádico. Nos invitaba a comer fuera, luego nos pesaba y nos multaba. Un día le dije: ‘Mire, entrenador, nunca he estado en San Vittore, pero con usted acabaré allí”.

Después, Lodetti estuvo en el Foggia con Cesare Maldini como entrenador y en el Novara. “Tenía 36 años e iba al campo todas las mañanas a las diez. Los otros, los chavales, llegaban dos horas más tarde. Me dije: ‘Vete a regalar el ciapp’. Lo dejé y me puse a trabajar. Quería tomarme un año libre, cuatro francos tenía. Pensé en hacer algo con los jóvenes, me había sacado el carnet. Me dieron con la puerta en las narices. Le dije a Rita, mi mujer: basta. Un amigo me llamó: ‘¿Quieres ser vendedor de baldosas?’ ¿Azulejos? Pero yo no sé nada. Fui vendedor durante 22 años, junté cotizaciones para mi pensión”. Luego también se divertía en la tele, hablando de fútbol, levantando su imperiosa barbilla ganchuda.

EL RECUERDO DE GIANNI RIVERA

Formidables aquellos años. Formidable aquel primer Milán de los milagros. Formidable aquella pareja en la que las tareas eran distintas pero cada uno sabía lo que tenía que hacer. Ciertamente fue otro fútbol, tan lejano que es difícil recordarlo incluso para quienes de alguna manera lo vivieron, lo apoyaron, lo atravesaron.

Los números que llevaban en la espalda eran los primeros que lo decían y podías citarlos en un instante, el 8 de Lodetti y el 10 de Rivera se los sabían todos de memoria. Igual que sabían de memoria los roles, las tareas, los territorios que los dos, en aquel Milán, tenían que ocupar.

Y la costumbre de verlos y verlas juntos era tan fuerte y arraigada, y no sólo entre los aficionados del Milan, que cuando en un momento dado la historia se rompió de cualquier manera, fue realmente algo sensacional, un paréntesis en una carrera que Lodetti vivió muy mal. Pero antes de eso hubo muchos buenos, y grandes momentos. Vividos juntos.

‘Bien juntos’ ‘Pasamos mucho tiempo y mucho fútbol juntos. Y éramos buenos juntos’. Gianni Rivera se entera de la muerte de Giovanni Lodetti y se nota que para él es una noticia que golpea en casa, de esas que pulsan el interruptor de la memoria. Había una buena relación entre nosotros”, dice el Balón de Oro de aquel primer Milan de los milagros.

Nueve años juntos, un largo camino común, dos veces la Copa de Campeones, un equipo en el que el genio de Rivera estaba protegido por el gran trabajo de Lodetti. Y luego mil batallas en el mismo bando, porque Lodetti estaba allí y Rivera también aquel día de la cacería de Buenos Aires en la famosa final de la Copa Intercontinental con los argentinos de Estudiantes en 1969.

“Trabajó en esa zona del campo por la derecha con el mediapunta y el extremo”, recuerda aún Rivera. De hecho, este verbo, ‘trabajar’, se utiliza poco en el fútbol, parece lejano, pero Rivera lo emplea instintivamente al hablar del trabajo de aquel compañero y de su diálogo con el mediapunta y el extremo derecho. “Así es el campo, no nos hacíamos sombra”.

Esa historia experimentó en un momento dado una especie de cortocircuito, una interrupción inesperada. El año de esta encrucijada fue 1970. Y sí, porque en aquella temporada sucedieron dos cosas: Lodetti fue el último hombre al que renunció el seleccionador Ferruccio Valcareggi, el 23º, el último sacrificado para llegar a la elección de los 22 azzurri que luego fueron a México tras la lesión de Anastasi: él en casa, Boninsegna y Prati convocados.

“Sí, me acuerdo de él, claro que me acuerdo de él. Rivera, en cambio, fue y pasó lo que pasó: Italia-Alemania 4-3 y luego el mecanismo de relevos que se atascó en el mejor momento y fue Rivera quien no entró en lugar de Mazzola, cuando el guión lo requería, sino sólo después, sustituyendo a Boninsegna, cuando Brasil ya nos había arrollado y entonces llegaron los tomates de los manifestantes decepcionados a su regreso a Fiumicino.

“Se sintió mal por ello” En realidad, sin embargo, en aquellas semanas ocurrió otra cosa: la historia de Lodetti en el Milan terminó. “Se sintió un poco mal por ello y, en cierto modo, también me responsabilizó a mí. Como jugador más representativo, eso es lo que él pensaba, había esperado mi intervención. Quería quedarse en el Milan, le importaba. Pero era una decisión del club en la que yo no podía opinar”.

Y la historia, la larga historia de aquel Milan, terminó. Rivera se quedó en los rossoneri, Lodetti se hizo blucerchiato y, unos años después, volvió a sus viejos colores yéndose al Foggia. Se dijeron basta un año después, Lodetti se marchó en 1978, Rivera la temporada siguiente. Pero aquel “nos llevábamos bien” hacía tiempo que había terminado.