Al final ha decidido operarse. En un intento, quizás desesperado, de seguir acortando el tiempo y volver de nuevo al campo. Zlatan Ibrahimovic ha sido operado esta mañana en Lyon en artroscopia por el doctor Bertrand Sonnery-Cottet, en la presencia del responsable sanitario rossonero Stefano Mazzoni, en el hospital Jean Mermoz.

Una intervención “programada desde hace tiempo” se lee en la nota del Milan “para resolver la inestabilidad de la articulación a través de la reconstrucción del ligamento cruzado anterior, con refuerzo lateral, con refuerzo lateral y reparación de menisco”. El tiempo de baja se estima en 7-8 meses.

Según diversos medios italianos, Ibrahimovic no piensa en retirarse, sino en todo lo contrario. La operación se ha realizado precisamente para eliminar todos los problemas de su rodilla para regresar nuevamente al campo para jugar y dar su contribución.

Su futuro en el Milan dependerá también de la nueva propiedad, que debería ocupar el sitio de Elliott en las próximas semanas. En RedBird le tocará el OK final para decidir si Ibra puede seguir vistiendo la camiseta rossonera la próxima temporada.

Zlatan puede efectuar la fase de rehabilitación en Milanello sin perder el contacto con el equipo, entrenador y directiva. La larga pausa para el Mundial de Catar 2022 (21 de noviembre al 18 de diciembre de 2022) será un factor importante para no tener tanta prisa en la fase de recuperación y, si todo va bien, Ibra podría volver en enero de 2023, es decir, justo cuando vuelva la Serie A y el resto del fútbol europeo.