Retoque de ofertas por Emerson y Fofana

Morata y Pavlovic no serán las únicas caras nuevas que la directiva rossonera quiere que Fonseca encuentre en Milanello tras la gira estadounidense. El próximo sábado, el objetivo de Ibrahimovic, Furlani y Moncada es dar al técnico portugués un medio centro y un lateral derecho, así como un suplente para Maignan.

Esta última negociación es más fácil que las otras por razones económicas, ya que la discusión con el Cagliari por Scuffet se basa en un préstamo (medio millón de euros) con derecho de rescate. Al mismo tiempo, sin embargo, los dirigentes rossoneri no quieren… hacer el juego al Tottenham y al Mónaco, que aguantan por Emerson Royal y Fofana, respectivamente.

En Via Aldo Rossi han movido ficha y creen haber hecho ofertas adecuadas tanto por el lateral brasileño como por el central francés. Ahora esperan respuestas de Londres y del Principado, sabedores de que ni Spurs ni Mónaco tienen prisa por vender, pese a encontrarse con el deseo de sus respectivos jugadores de cambiar de camiseta y continuar su carrera en el Milan.

En el caso de Emerson, la distancia entre la oferta y la demanda es ahora de algo más de un millón de euros, y en los últimos días el Diavolo ha aumentado ligeramente su oferta para satisfacer los deseos del ex-lateral del Barcelona, que actualmente juega amistosos con el Tottenham, pero que desea iniciar un nuevo capítulo en su carrera lejos de la Premier League. Levy, sin embargo, está demostrando ser un rival muy duro.

El centrocampista, una vez finalizadas sus vacaciones post-europeas, se presentó ayer regularmente para la reanudación de los entrenamientos y el club monegasco lo anunció a través de su página web oficial. Una forma de reiterar la postura ya expresada el martes, en rueda de prensa, por el director general Thiago Scuro: la venta de Fofana no debe darse por hecha y el centrocampista también puede marcharse el próximo verano. Sobre todo teniendo en cuenta que el entrenador Hütter no cuenta en estos momentos con otro titular de su nivel.

Hacer cambiar de opinión a Youssouf, sin embargo, será bastante complicado porque, al expirar su contrato en 2025, ha decidido seguir su carrera en otro sitio. Y ha elegido el Milan porque Fonseca le adora y porque con el Diavolo, además de jugar la Liga de Campeones, aspirará a ganar algún trofeo. Antes de que el West Ham entrara en escena con una propuesta muy elevada (treinta y cinco millones) por un centrocampista que podrá fichar a cero por cualquier formación en enero, la directiva rossonera tenía un principio de acuerdo con los franceses de catorce millones más primas.

Tenía que definir la parte variable, pero la operación parecía destinada a cerrarse rápidamente. La oferta de los Hammers permitió al Mónaco elevar sus exigencias, muy por encima de los veinte millones que el Niza cobró del Juventus por Thuram. El Milan también ha dado un pequeño paso adelante en este caso y ahora espera una respuesta para el fin de semana o principios de la próxima semana. El regreso de América del consejero delegado Furlani y del entrenador Moncada no es casual: ambos saben que el mercado ha entrado en un momento caliente y es mejor seguir las negociaciones sin el obstáculo de la diferencia horaria.

El Diavolo tampoco ha dejado de vigilar a Samardzic, que ya ha dado su OK para fichar por los rossoneri, pero en el Udinese la distancia entre oferta y demanda es considerable. El serbio, de 22 años, interesa mucho en el futuro y Via Aldo Rossi seguirá atento a la situación, dispuesto a intervenir si los friulanos rebajan sus exigencias, quizá “empujados” por el pressing del centrocampista. En ataque, por último, para que haya un nuevo fichaje es necesario que se encuentre un destino para Jovic o que se incluya al serbio en un intercambio.