Se acabó el crédito para todos

El gol de Pulisic a los tres minutos de partido fue una ilusión, porque a partir del minuto quince de la primera parte el Milan volvió a ser ese equipo apático y desorganizado, falto de alma y carácter, que la afición ya había rebatido al final de la temporada pasada.

Hay formas y formas de perder, pero a estas alturas es como si los rossoneri no supieran cómo hacerlo, porque cuando ocurre siempre es un desastre. El Milan, por tanto, sale estrellado de la primera jornada de la nueva Liga de Campeones, escribe esta mañana La Gazzetta dello Sport. Un equipo desatado, inadecuado y unipersonal, con enormes lagunas defensivas a las que Paulo Fonseca aún no ha sabido encontrar solución.

Una vez más se apuntó a la banda derecha del Milan, la débil para ser exactos, que, por muy culpable que sea (dos de los tres goles de anoche vinieron precisamente de ese lado), no es más que una pieza de un puzzle nada equilibrado a nivel táctico. Tanta desgana atrás no se compensa con la rotación ofensiva, con un Leao totalmente eclipsado que esperó hasta el minuto 96 para regalar a los pocos que quedaban en San Siro uno de sus anillos.

Como se preveía, el Milan descendió inmediatamente de categoría tras la amplia victoria del sábado por la noche contra el Venezia, y el domingo llega el derbi. Perder de otra manera quizás habría cambiado la forma de interpretar la derrota del pueblo rossonero, que a través de sus mayores exponentes, la Curva Sud milanista, soltó una dura protesta en el momento de la triple pitada del Milan-Liverpool.

La situación preocupa, y no poco, pero por otro lado el comienzo de la temporada fue una fuerte señal de alarma que llevó a los mismos aficionados organizados a enviar un claro mensaje al equipo el sábado antes de Venezia: “Última llamada“. En aquel caso el equipo lo recibió, anoche no, lo que confirma que algo sigue fallando. En este Milan no hay inocentes. La culpa es de todos.

PAULO FONSECA

¿Qué opina de la protesta de los aficionados?

“No creo que haya sido un problema de actitud. Empezamos bien, tanto defensiva como ofensivamente. Sin embargo, tras el segundo gol, nos desequilibramos emocionalmente, el equipo empezó a cometer errores que son fatídicos contra equipos como el Liverpool. Tengo que decir que el Liverpool fue más fuerte que nosotros y lo es ahora mismo”.

¿Cuál es el problema más grave?

“Aún no he hablado con los chicos. Tenemos varios problemas. Cuando las cosas van bien el equipo quiere jugar y hacer las cosas bien, cuando hay problemas al equipo le falta coraje para hacer lo mismo. Defensivamente, somos frágiles. El uno contra uno siempre ha sido difícil, hay dificultades evidentes…”

¿Pueden resolverse los problemas para el derbi?

“Trabajar, observar, mostrar lo que se hizo bien y lo que hicimos mal. Los objetivos que nos marcamos no son muy activos para este tipo de competición. Pero trabajar es la única manera de cambiar las cosas”.

Cuando fichó por el Milan, ¿esperaba que fuera tan difícil?

“Me trajeron aquí para cambiar la forma de jugar del equipo y eso es lo que estoy intentando hacer. Sabía que sería difícil. Cambiar tanto siempre es difícil y no está resultando fácil, porque es un cambio muy grande. Soy tan fuerte como el primer día, sabiendo que los resultados no son los que queremos y que no tenemos tiempo. Lo que me ha traído aquí es mi forma de jugar y eso es lo que voy a seguir haciendo con este equipo”.

Sobre el marcaje en las jugadas a balón parado

“En el primer gol hay marcaje hombre a hombre sobre Van Dijk y el otro central. Habíamos preparado el partido para marcar individualmente a los dos centrales”.

¿Por qué Leao recibió tan pocos pases?

“Fue algo que preparamos en el poco tiempo del que disponíamos. Explotar el pasillo derecho para servir a Leao con el pase largo y ponerle en posición de aprovechar el uno contra uno”.

¿Por qué no explotar a Reijnders y Loftus-Cheek como centrocampistas?

“Respeto todas las opiniones. Pero creo que podemos con diferentes estructuras. Busco las mejores características para nuestros centrocampistas. Creo que Reijnders no es un jugador para jugar al lado de Fofana, me gusta la estructura con dos centrocampistas y así es como creamos las situaciones más peligrosas”.