Sergio Conceiçao en tan solo dos partidos remonta ante la Juventus en la semifinal (1-2) y ahora le remonta un 2-0 al Inter, haciendo 3 goles en la segunda parte y obteniendo así la Supercopa de Italia, gracias a los tantos de Theo, Pulisic y Abraham
Una semana, poco más, de Milan y ya un trofeo con Juventus e Inter derrotados. Sergio Conceiçao no podía haber pedido un mejor comienzo para su aventura rossonera. El técnico portugués, según palabras de los protagonistas, entró con fuerza en la cabeza de los jugadores, dando una sacudida al ambiente.
Mucha energía, mucha garra y mucha tensión, que se disolvieron en lágrimas con el pitido final: el Milan ganó la Supercopa de Italia al imponerse por 3-2 al Inter y Conceiçao, aclamado por el estadio y abrumado por los jugadores, se emocionó hasta las lágrimas.
PRIMERA PARTE
El primer tiempo en Riyad ofreció un duelo equilibrado entre el Inter y el Milan, dos equipos que mostraron intensidad y calidad en esta final de la Supercopa Italiana. A pesar de la paridad en el juego, una distracción del Milan en los últimos segundos de la primera mitad permitió al Inter irse al descanso con ventaja gracias a un gol de Lautaro Martínez.
Desde el pitido inicial, ambos equipos intentaron tomar la iniciativa. El Milan comenzó con intensidad, generando peligro desde los primeros minutos. En el minuto 5, Reijnders recuperó un balón en la tres cuartos y filtró un pase hacia Pulisic, quien tras un rebote llegó a tocar la pelota, pero Sommer intervino oportunamente para despejar el peligro.
Por su parte, el Inter no tardó en responder. En el minuto 6, Bastoni lanzó un pase largo espectacular hacia Lautaro Martínez, que controló de manera impecable dentro del área, pero Thiaw, con una barrida precisa, evitó que el delantero argentino rematara a portería.
Ambos equipos tuvieron oportunidades de adelantarse en el marcador. En el minuto 12, Barella asistió a Taremi, quien conectó un cabezazo que salió desviado, sin inquietar al portero Maignan. Minutos después, el Milan tuvo una buena ocasión con una jugada individual de Reijnders, que logró deshacerse de un defensor con un gran movimiento, pero su remate de zurda salió ligeramente desviado (15’).
En el minuto 23, el Inter volvió a acercarse con peligro tras un disparo desde fuera del área de Dimarco, que obligó a Maignan a intervenir y desviar el balón por encima del travesaño. El partido se mantuvo muy igualado hasta los últimos minutos del primer tiempo. En el 35’, el Inter se vio obligado a realizar su primer cambio: Hakan Calhanoglu salió del campo por molestias en el aductor, siendo reemplazado por Kristjan Asllani.
El Milan tuvo una gran oportunidad al 41’, cuando Jiménez condujo una jugada en vertical y dentro del área intentó asistir a Morata, quien estaba solo frente a Sommer, pero un excelente cruce de Bastoni evitó el gol y envió el balón a córner.
Cuando parecía que el primer tiempo terminaría sin goles, una distracción del Milan tras una sencilla jugada de saque de banda fue fatal. Lautaro Martínez recibió el balón dentro del área, realizó una finta para deshacerse de la defensa y, con un zurdazo certero, batió a Maignan para adelantar al Inter en el marcador. Fue un golpe psicológico justo antes del descanso para un Milan que hasta ese momento había competido de igual a igual.
El árbitro concedió un minuto de añadido, suficiente para que el Inter se fuera al vestuario con ventaja. Pese a la desventaja, el Milan mostró buenos momentos de juego, especialmente en la construcción ofensiva, mientras que el Inter aprovechó su efectividad y solidez defensiva en momentos clave.
SEGUNDA PARTE
El segundo tiempo comenzó con fuerza para el Inter, decidido a sentenciar el partido. En el minuto 47, Taremi recibió un pase largo desde la defensa, controló con clase y, con un derechazo preciso, superó a Maignan. Este gol parecía el principio del fin para el Milan, que se encontraba 2-0 abajo y contra las cuerdas.
Conceição, entrenador del Milan, reaccionó inmediatamente introduciendo a Rafael Leao en el minuto 50, buscando más velocidad y creatividad en ataque. El Milan no bajó los brazos y rápidamente encontró una respuesta: una falta al borde del área permitió a Theo Hernández ejecutar un tiro libre perfecto. El francés sorprendió a Sommer con un disparo que se coló por su palo, reduciendo la ventaja a 2-1. Este gol encendió la chispa de la remontada milanista.
En el 62′ Rafael Leao protagonizó una espectacular jugada individual por la banda izquierda. El portugués superó a su marcador y asistió a Reijnders, cuyo disparo fue bloqueado de forma afortunada por Bastoni con el rostro.
El Inter tuvo oportunidades para sentenciar el partido, como un cabezazo de Carlos Augusto en el minuto 72 que pegó en el palo interno y cayó en las manos de Maignan. Sin embargo, el Milan siguió insistiendo. En el 77′ Conceição realizó un doble cambio clave, ingresando a Tammy Abraham y Ruben Loftus-Cheek. (saliendo Musah y Reijnders).
La insistencia milanista dio frutos. Una combinación entre Leao y Theo Hernández por la izquierda terminó con un pase hacia atrás del lateral francés para Pulisic. El estadounidense controló con calma y, con un zurdazo colocado al ángulo, igualó el marcador 2-2 en el 80′.
El gol desató la euforia de los aficionados del Milan, que ahora creían en la remontada. El Inter intentó responder, pero Maignan se convirtió en un muro en los minutos finales. En el 88′, realizó una intervención crucial, deteniendo un remate de Dumfries que pudo haber cambiado el destino del partido.
Cuando el partido parecía dirigirse a la prórroga, el Milan dio el golpe final. Leao, nuevamente determinante, recibió un pase de Pulisic dentro del área, superó a Sommer y asistió a Tammy Abraham, quien empujó el balón al fondo de la red para sellar el 2-3 definitivo.
El estadio explotó de emoción, y los jugadores del Milan celebraron una de las remontadas más impresionantes en una final de Supercopa Italiana, siendo el primer título no solo para Conceiçao con el Milan que acaba de llegar, sino también para muchos de los jugadores que visten la camiseta rossonera.
MI OPINIÓN
Es bastante curioso que el Milan en dos partidos remonte en cada segunda parte, con dos goles a la Juventus y tres goles al Inter, cuando seguramente muchos ya pensaban que el 2-0 nada más empezar el segundo tiempo iba a ser una losa difícil de superar, pero este Milan esta temporada es capaz de lo mejor y lo peor.
El segundo tiempo fue un ejemplo de coraje y determinación por parte del Milan. Liderados por Leao, Pulisic y Theo Hernández, los rossoneri supieron dar la vuelta a un partido que parecía perdido. Maignan también fue clave con sus paradas decisivas, mientras que Tammy Abraham se convirtió en el héroe inesperado con el gol definitivo (siendo además votado como jugador del partido).
Ganar un trofeo es importante, y ganarlo contra el Inter, remontando una desventaja de dos goles, no tiene precio. El Milan conquistó la Supercopa de Italia por octava vez y, ocho años después de la última, igualó a los nerazzurri y empezó 2025 de la mejor manera posible.
Mérito de un equipo que no dejó de creer, que logró remontar un partido que en otras ocasiones podría haber acabado en derrota. Y de un entrenador que cambió en pocos días la cabeza de un grupo lleno de incertidumbres. Sergio Conceiçao llegó al Milan hace ocho días y ya tiene un título en su palmarés. Al fin y al cabo, no es casualidad que el portugués sea el entrenador más laureado de la historia del Oporto.